El ministerio de asuntos exteriores de la India ha declarado que “no tiene conocimiento” de una llamada telefónica en la que el presidente estadounidense Donald Trump afirmó que el primer ministro indio, Narendra Modi, acordó dejar de comprar petróleo ruso.
El miércoles, Trump dijo que su homólogo indio le había “asegurado hoy” que pondría fin a las importaciones de petróleo ruso, una medida que Estados Unidos ha impulsado para aumentar la presión económica sobre el Kremlin y que termine la guerra en Ucrania.
Sin embargo, al ser preguntado sobre la llamada el jueves, un portavoz del gobierno indio puso en duda la versión de Trump, diciendo que “no tenía constancia de ninguna conversación entre los dos líderes” que hubiera tenido lugar el día anterior.
El gobierno indio había dicho anteriormente que las discusiones con Estados Unidos sobre sus compras de petróleo ruso todavía estaban “en curso”.
La India se ha convertido en un cliente energético clave para Rusia desde el inicio de la guerra, permitiendo en parte al Kremlin resistir el impacto de que los aliados de Ucrania reduzcan las importaciones de petróleo y gas, que son su mayor mercado de exportación.
La administración Trump ha ejercido presión pública y diplomática sobre la India para que termine su apoyo al mercado energético ruso, ya que busca aumentar el aislamiento económico del Kremlin y forzar el fin de la guerra. Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022.
Hablando en la Casa Blanca el miércoles, Trump dijo que había recibido garantías de Modi de que la India detendría sus compras “en un corto período de tiempo”.
En su respuesta inicial, el gobierno indio no negó directamente que la llamada entre Trump y Modi hubiera ocurrido. Dijo: “Nuestra prioridad constante es proteger los intereses del consumidor indio en un escenario energético volátil. Nuestras políticas de importación se guían completamente por este objetivo”.
La segunda respuesta del gobierno indio el jueves plantea más dudas sobre si se ha llegado a un acuerdo entre Washington y Delhi.
La BBC News se ha puesto en contacto con la Casa Blanca y el Departamento de Estado para obtener comentarios.
La continua dependencia de Delhi del crudo ruso, que importa con descuento, se ha convertido en una fuente clave de disputa en las relaciones entre Estados Unidos y la India bajo la administración Trump, que ha adoptado una postura más dura sobre la guerra de Ucrania después de que el presidente ruso Vladimir Putin no lograra acordar un tratado de paz con la Casa Blanca.
La India es solo superada por China en la cantidad de energía rusa que importa, una financiación que ayuda a evitar el colapso de la crítica industria de combustibles fósiles de Rusia.
El gobierno de Modi ha acusado a los aliados de Ucrania de hipocresía, señalando el comercio continuo con Rusia, incluidas las importaciones de energía a la Unión Europea, aunque a niveles reducidos.
En su última ronda de sanciones presentada esta semana, el gobierno británico dijo que apuntaría a una importante refinería de petróleo india, ya que “continúa facilitando que el petróleo ruso llegue a los mercados globales”. Funcionarios dijeron que la empresa india Nayara Energy Limited importó 100 millones de barriles de crudo ruso por valor de más de $5 mil millones solo en 2024.