Valiant One, el thriller militar dirigido por Steve Barnett, sumerge al espectador en la historia de alto riesgo de un helicóptero del ejército estadounidense que se estrella en territorio norcoreano. Protagonizada por Chase Stokes como el Sargento Edward Brockman y Lana Condor como la Especialista Selby, la película ofrece una narrativa intensa de supervivencia y heroísmo. La cinta no pierde tiempo en sumergir a los espectadores en el caos de una misión rutinaria que sale mal.
El argumento sigue a un pequeño grupo de reservistas no combatientes encargados de escoltar a un especialista en tecnología civil, Josh Weaver (Desmin Borges), para reparar equipos de vigilancia cerca de la Zona Desmilitarizada de Corea. Una tormenta repentina desvía su helicóptero, estrellándose en territorio enemigo. Con las comunicaciones caídas y su oficial al mando, Chris Lebold (Callan Mulvey), muerto, Brockman, un analista con poca experiencia en campo, debe liderar a los sobrevivientes—Selby, Lee (Daniel Jun), Ross (Jonathan Whitesell) y Weaver—a través de un terreno hostil hacia la seguridad. La premisa promete tensión y una clásica historia de gente común enfrentando desafíos extraordinarios.
Chase Stokes da una actuación sólida como Brockman, encarnando a un líder reacio, con una transformación de soldado de escritorio a comandante decisivo, aunque el guión no siempre profundiza en su arco. Stokes trae un carisma discreto, similar a su papel en Outer Banks, pero a veces parece demasiado pulido para el entorno militar. Lana Condor, de quien soy gran fan, brilla como Selby, el personaje más destacado. Sus escenas, especialmente las de triaje bajo presión, muestran su capacidad para sostener el peso emocional del grupo. Su química con Stokes es un punto fuerte, aunque el guión no explora su dinámica tanto como podría.
Steve Barnett, en su debut como director después de una carrera como productor, demuestra habilidad para filmar acción con bajo presupuesto. Los tiroteos están bien coreografiados, pero en algunas secuencias los efectos especiales no son tan buenos. Temáticamente, la película quiere celebrar el heroísmo de los reservistas, con el mensaje de que "los héroes no nacen, se hacen". Es un sentimiento noble, pero la falta de profundidad en las complejidades morales del escenario—soldados perdidos en una zona políticamente tensa—se siente como una oportunidad perdida.
A pesar de sus fallas, Valiant One tiene sus momentos. Los fans de Stokes y Condor disfrutarán de sus actuaciones, aunque la historia no aproveche todo su potencial. Para quienes busquen un thriller rápido y sin complicaciones, la película cumple, gracias al compromiso de sus protagonistas.
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