Aunque el 2025 no se ha caracterizado por tantas protestas contra el turismo masivo en España como el año anterior, los nuevos datos indican que el descontento de la población local con el modelo turístico actual sigue en aumento.
La última edición del Barómetro de Percepción del Turismo, elaborado por la firma global de comunicación LLYC, revela que la opinión de los españoles sobre el turismo en su país ha descendido 0,4 puntos durante el tercer trimestre de 2025, situándose ahora en un 4,3 sobre 10.
Actualizado trimestralmente, el informe muestra que el descontento con el turismo ha aumentado en un 40 por ciento desde la primera encuesta, realizada en 2022.
El turismo de masas y su impacto en el precio de la vivienda siguen siendo la queja principal, dominando los debates en las plataformas digitales.
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A pesar de una ligera mejora en comparación con el trimestre anterior, estos temas continúan siendo los más debatidos, seguidos por las preocupaciones relacionadas con la seguridad, que representan un 15 por ciento de las menciones.
“El impacto del turismo es especialmente visible en las regiones urbanizadas con un alto flujo de visitantes”, señala el estudio de LLYC.
Gráficos de LLYC que muestran el descontento con el turismo entre los españoles en el T3 de 2025.
Madrid, Cataluña y Andalucía son las comunidades autónomas más mencionadas en los debates en línea, lo que evidencia reacciones más polarizadas en estos territorios.
Cataluña es la región donde los residentes tienen la opinión más baja sobre el turismo en el país (2,8 puntos). Esta comunidad autónoma nordeste ha experimentado un aumento del 42 por ciento en las quejas sobre seguridad, convirtiéndose esta en la principal inquietud entre sus habitantes. Los carteristas, por ejemplo, son más frecuentes en zonas con gran afluencia turística como Barcelona.
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En el extremo opuesto de la escala, Extremadura lidera la tabla con 7 puntos sobre diez en satisfacción turística, seguida de cerca por Aragón y Castilla y León, ambas con 6,7 puntos.
En estas regiones, lo más valorado por los españoles es la preservación de la cultura local. Los encuestados también destacan las experiencias y lugares “únicos” y menos masificados que ofrecen estas regiones.
Huelga decir que se trata de regiones extensas con un gran potencial turístico sin explotar y que reciben menos visitantes en comparación con otras, lo que explica por qué el turismo masivo no se ha convertido en un problema allí.
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Mientras que la mayoría de las regiones españolas han visto empeorar su opinión sobre el turismo, la percepeión en las Islas Canarias se ha mantenido estable en 4,5 puntos, lo que de todos modos se considera suspenso.
En el archipiélago atlántico, el número de mensajes quejándose del turismo masivo disminuyó un 30 por ciento en el segundo trimestre; el tono ha sido más positivo y menos crítico, aunque todavía insuficiente para ser considerado favorable.
En 2024, se produjeron varias protestas antiturísticas en las Islas Canarias, lo que demuestra que aún queda mucho por hacer allí para mejorar las relaciones entre la población local y los turistas.
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Los descensos más notorios en la percepción del turismo se observaron en Galicia, Cantabria, Asturias y La Rioja, donde el aumento de las conversaciones sobre gentrificación, el deterioro del bienestar local y la masificación han influido negativamente en la opinión pública.
Quizá esto resulte sorprendente, dado que estas regiones del norte (o ‘verde’) de España no reciben grandes cantidades de turistas internacionales.
No obstante, se están volviendo mucho más populares entre los turistas nacionales y los vacacionistas internacionales que intentan escapar del calor intenso en el resto del país durante los veranos cada vez más largos de España.