Irán ha sentenciado en ausencia al cineasta ganador de la Palma de Oro, Jafar Panahi, a un año de prisión y una prohibición de viajar por “actividades de propaganda” en contra del país.
La sentencia incluye una prohibición de dos años para salir de Irán y la imposibilidad de que Panahi sea miembro de cualquier grupo político o social, según dijo su abogado Mostafa Nili, añadiendo que presentarían un apelación.
Nili indicó que los cargos contra el director iraní eran por realizar “actividades de propaganda” contra el estado, pero no dió más detalles. “El señor Panahi se encuentra actualmente fuera de Irán”, agregó.
Panahi, de 65 años, ganó el premio principal del Festival de Cine de Cannes este año por *It Was Just an Accident*, una película en la que cinco exreclusos contemplan si vengarse de un hombre que creen que era su antiguo carcelero.
El mes pasado, estuvo de gira por Estados Unidos, visitando Los Ángeles, Nueva York y Telluride, Colorado, para promover su última película, que aspira al Oscar.
La película ha sido seleccionada por Francia como su nominación oficial para los Premios de la Academia, y se espera ampliamente que entre en la lista corta para el mejor filme internacional en la gala de marzo.
La victoria de Panahi en Cannes fue reportada por los medios iraníes, que en su momento celebraron el premio con una foto de él.
Ha ganado una gran cantidad de premios en festivales europeos y presentó su película debut, *The White Balloon*, en Cannes en 1995, la cual ganó un premio a la mejor primera película.
En 2010, Panahi fue prohibido de hacer películas y de salir de Irán después de apoyar las protestas masivas contra el gobierno un año antes y por hacer una serie de películas que criticaban la situación del Irán moderno.
Condenado por “propaganda contra el sistema”, fue sentenciado a seis años de cárcel, pero solo cumplió dos meses tras las rejas antes de ser liberado bajo fianza.
Un año después de recibir una prohibición de 20 años para hacer cine, envió un documental titulado *This is Not a Film* al festival de Cannes en una memoria USB escondida dentro de un pastel.
Su película de 2015, *Taxi*, fue filmada enteramente dentro de un automóvil y mostraba a Panahi interpretando a un conductor de taxi.
En 2022, fue arrestado en relación con protestas de un grupo de cineastas, pero fue liberado casi siete meses después.
Los cineastas, figuras mediáticas prominentes y celebridades iraníes son vigilados de cerca en Irán y su trabajo es revisado en busca de contenido considerado crítico con el país.
El año pasado, el director multipremiado Mohammad Rasoulof huyó de Irán para escapar de una sentencia de prisión por cargos de “colusión contra la seguridad nacional”.