El Grupo Socialista en Sóller ha criticado al ayuntamiento por su intención de sacar adelante la nueva ordenanza de regulación de playas, que incluye medidas como la prohibición de juegos y actividades lúdicas o el nudismo. Según un comunicado difundido por el PSIB, los socialistas tachan estas medidas de “propia de tiempos pasados” y, por tanto, presentarán enmiendas con el fin de “suavizarlas” o “reconducir muchas de las restricciones carentes de sentido”.
El portavoz del grupo socialista en la corporación, Jaume Mateu, reconoció que acogen con agrado la creación de una ordenanza cívica, pero arguyó que esta debe servir “para fomentar la convivencia y permitir que todo el mundo disfrute de las playas, tanto turistas como residentes”. La normativa propuesta por el consistorio de derechas del Partido Popular es “muy dura, atenta contra la libertad y no tiene en cuenta la realidad de los niños pequeños y las familias del municipio”.
“Cuando entramos en el tercer verano sin ninguna medida para combatir la saturación turística y la congestión en nuestras carreteras, el PP propone restricciones para los residentes y familias de Sóller, que no podrán jugar en la arena de nuestras playas”, criticó Mateu. El socialista también cuestionó cómo piensa el ayuntamiento hacer cumplir esta ordenanza y aplicar su régimen sancionador, que incluye multas de hasta 3.000 euros, dados los problemas de transporte y tráfico y la sobrecarga de trabajo de la policía local.
Por ello ha pedido una revisión de las prohibiciones y un compromiso con la regulación de la convivencia mediante medidas como campañas de concienciación sobre comportamiento cívico en las playas, el establecimiento de horarios para llevar perros o la regulación del tabaquismo. Además, los socialistas han solicitado al alcalde, Miquel Nadal, que centre su atención en los problemas acuciantes de la comunidad local, como la dificultad para acceder a la vivienda, la escasez de agua y las cuestiones de movilidad.
Puerto de Sóller es muy apreciado por su combinación única de una belleza natural espectacular, un ambiente relajado y distinguido, y un encanto histórico. Enclavado en una amplia bahía en herradura, resguardada y rodeada por las montañas de la Serra de Tramuntana (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO), ofrece una experiencia tranquila y distinta al resto de Mallorca. El puerto está circundado por imponentes montañas que se funden con el mar, brindando vistas panorámicas desde casi cualquier punto. Es también uno de los mejores lugares de la isla para contemplar la puesta de sol sobre el Mediterráneo. El Puerto de Sóller cuenta con las únicas playas de arena significativas de la escarpada costa oeste, por lo que sus aguas tranquilas y cristalinas son ideales para el baño y las familias.
