La provincia de Málaga enfrentó su primera gran alerta de incendios forestales del verano el viernes 11 de julio, con tres fuegos simultáneos en Villanueva de la Concepción, Álora y Casares, que mantuvieron a los servicios de emergencia en vilo hasta altas horas del sábado.
Solo el incendio de Álora logró ser controlado al amanecer, aunque persisten focos residuales por extinguir.
El primer fuego comenzó hacia las 19:30 en la zona de El Paraíso (Villanueva de la Concepción), donde vientos fuertes avivaron las llamas en un terreno cubierto de matorrales secos, hierba alta y arboleda. El servicio de incendios Infoca desplegó varios medios aéreos—retirados al anochecer por mala visibilidad—y brigadas terrestres. Una densa columna de humo fue visible incluso desde Málaga capital. Aunque el fuego no amenazaba zonas urbanas, varias fincas y una granja cercana permanecieron en prealerta de evacuación. Las llamadas al 112 alertaron de su avance desde rastrojos a terreno forestal, movilizando a policías locales y nacionales, Guardia Civil, Protección Civil, Infoca y bomberos.
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Hacia las 22:00, un segundo incendio surgió en El Aljibe (Álora), declarado controlado a la 1:10 según Infoca. En Casares, un tercer fuego se originó en la planta de residuos de la Costa del Sol, expandiéndose hacia un polígono industrial en dirección a Estepona, sin alcanzar propiedades vecinas. El ayuntamiento instó por redes sociales a evitar la zona.
La combinación de vegetación espesa, vientos intensos y múltiples frentes complicó las tareas de extinción, prolongándose los trabajos hasta la mañana del sábado.