El anteproyecto de ley para regular la entrada de vehículos en Mallorca, en el que trabaja actualment el Consell de Mallorca, incluye multas de hasta 30.000 euros para infracciones muy graves. El presidente del Consell, Llorenç Galmés, y el conseller de Territori, Mobilitat i Infraestructures, Fernando Rubiode, lo anunciaron hoy, viernes.
El borrador prevé sanciones leves de entre 300 y 1.000 euros; graves, de 1.000 a 10.000 euros; y muy graves, de 10.000 a 30.000 euros. Los vehículos que incumplan la normativa también podrán ser inmovilizados temporalmente y se impondrán multas coercitivas, que podrán repetirse cada dos meses.
Rubio consideró que el sistema de sanciones es “contundente” y está en línea con normativas similares ya vigentes en Ibiza y Formentera. Además de las multas, el Consell de Mallorca también pretende exigir el pago de una tasa por acceder a la isla durante el periodo de vigencia de la regulación. Galmés, no obstante, no aclaró el importe y dijo que se fijaría más tarde en base a estudios técnicos.
Asimismo, se aplicará un impuesto a los vehículos no matriculados en Baleares, y el Consell Insular establecerá, de forma anual o bianual, el número máximo de vehículos que podrán ingresar a la isla. Se dará prioridad a los eléctricos y no contaminantes, mientras que quedarán exentos los vehículos de residentes, personas con movilidad reducida, servicios de emergencia y seguridad, transporte de mercancías y distribución comercial.
Los no residentes que sean propietarios de una vivienda en Mallorca solo podrán circular con un vehículo por titular, siempre que estén empadronados fiscalmente en dicha dirección.