Las ráfagas de viento del Huracán Melissa alcanzaron una velocidad récord poco antes de que la tormenta tocara tierra en el Caribe el mes pasado, según los datos registrados durante este evento mortal.
La información fue recogida cuando un avión Cazahuracanes de la NOAA soltó un grupo de instrumentos meteorológicos dentro de la violenta tormenta, según un comunicado de prensa del Centro Nacional de Investigación Atmosférica de los Estados Unidos. Estos dispositivos, llamados “dropsondas”, tienen pequeños paracaídas y toman entre dos y cuatro lecturas por segundo antes de caer al océano.
Las dropsondas son los únicos dispositivos que pueden registrar a la vez información sobre presión, temperatura, humedad y viento. Estos datos se usan en pronósticos y alertas meteorológicas, incluyendo avisos de emergencia.
“Cuando tienes un huracán categoría 4 o 5, no vas a tener un avión volando tan cerca de la superficie – eso sería totalmente inseguro – pero necesitas saber qué está pasando a nivel del mar porque es allí donde las personas y las propiedades son más afectadas,” dijo Terry Hock, ingeniero del NSF NCAR que gestiona el programa Dropsonde, en el comunicado. “La dropsonde te da información que no puedes obtener de otra manera y por eso ha existido durante décadas.”
Una dropsonde utilizada durante el Huracán Melissa registró una ráfaga de viento de 252 millas por hora poco antes de caer al mar.
Una dropsonde NRD41, como las soltadas en el Huracán Melissa, con el Huracán Irma al fondo.
Holger Vömel/NSF NCAR
Los investigadores de la NOAA contactaron al NSF NCAR para confirmar si era la velocidad del viento más alta jamás registrada por una dropsonde.
“La NOAA nos contactó cuando vieron la alta velocidad del viento y preguntaron, ‘¿Son confiables estos números?’”, dijo Holger Vömel, un científico senior del NSF NCAR que trabaja con el Programa Dropsonde de la organización.
Para verificar los datos, Vömel y otros investigadores revisaron las cifras con un software de control de calidad. Tambien confirmaron que la ráfaga de viento reportada de 252 millas era físicamente posible y que coincidía con el comportamiento del huracán y con patrones de tormentas anteriores. La revisión confirmó que la medición de la ráfaga era correcta.
La ráfaga de viento más rápida registrada anteriormente por una dropsonde fue en 2010, cuando el Tifón Megi liberó una ráfaga de 248 millas por hora sobre el Océano Pacífico occidental. Durante el Huracán Katrina, los investigadores pensaron que habían registrado una ráfaga aún más fuerte, pero los datos tenían problemas sustanciales, dijo el NSF NCAR.
El Huracán Melissa es visto en una imagen satelital capturada a las 8:50 a.m. EDT, 29 de Octubre, 2025.
NOAA/NESDIS/STAR GOES-19
“Tenemos pilotos e investigadores que literalmente arriesgan sus vidas para obtener estas mediciones. Ellos son los héroes, y es un privilegio para nosotros poder desempeñar un papel para asegurar que las mediciones que adquieren sean precisas,” dijo Vömel.
El Huracán Melissa causó daños catastróficos en el Caribe a fines de octubre. Tocó tierra en Jamaica como una tormenta de Categoría 5 antes de avanzar hacia Cuba, las Bahamas, la República Dominicana y Haití. Decenas de personas, principalmente en Jamaica y Haití, murieron en la tormenta.