Para los actores en sets de televisión o cine, no es raro recibir la solicitud de entrar a un estudio lleno de un montón de cámaras listas para capturar su imagen desde todos los ángulos posibles. Pero con el elenco y el equipo de producciones ya preocupados por el futuro papel de la inteligencia artificial en la industria, se ha convertido en una práctica cada vez más problemática.
"Ocurre sin previo aviso", dice Olivia Williams, quien agrega que la han escaneado más veces de las que quisiera recordar durante una carrera que va desde The Sixth Sense hasta Dune: Profecía.
"Estás en el set. Estás en vestuario. Un asistente de dirección simpático, que ya conoces, que te trae té y cuida tu teléfono mientras actúas, te dice que el equipo de VFX [efectos visuales] está hoy – y que justo después de terminar la escena, ¿podrías pasar al autobús de VFX? Y allá vas".
"Los actores son, en general, gente que le gusta complacer. Tener un enfrentamiento por los escaneos cuando estás en medio de una escena aniquila tu creatividad y genera miedo a que nunca más trabajarás, a que tu agente te abandone. Así que accedes".
Actores principales, de reparto, dobles de riesgo y bailarines han contado al Guardian experiencias similares en el set, de ser llevados a los escáneres a pesar de no tener claros sus derechos sobre los datos biométricos que se producen.
Williams dijo que a los artistas les dicen que "si quieren salir en la escena, o quieren que la escena se vea genial con el alienígena saliendo de su cerebro", entonces los escaneos son necesarios.
Los escaneos ‘ocurren sin previo aviso’, dijo Olivia Williams, quien afirmó que los actores acceden por ‘miedo a nunca volver a trabajar’. Fotografía: David Vintiner/The Observer
Esta experiencia ha causado inquietud por algún tiempo, pero el desarrollo de "dobles de IA" para los artistas y las afirmaciones sobre la llegada de "actores de IA" han dado urgencia a aclarar exactamente qué pasa con los datos recolectados en el set.
Esas preocupaciones salieron a la luz pública con la publicidad alrededor de una actriz de IA llamada "Tilly Norwood". Es poco probable que la compañía detrás de esta creación genere la primera estrella de IA, pero ha dado un enfoque a una lucha continua para clarificar los derechos de los intérpretes.
Williams decidió alzar la voz por preocupación por los actores jóvenes que empiezan, así como por la amenaza existencial para los artistas conocidos en la industria como "artistas de apoyo", que pueblan las multitudes y fondos de un programa.
Dave Watts, un artista de apoyo con experiencia que ha aparecido en numerosas películas de superhéroes y grandes producciones, ha sido escaneado varias veces. Dijo que hay implicaciones más amplias para la industria.
"Ya escucho a miembros del equipo decir: ‘Para ser honestos, ya ni necesitamos hacer esto. Podemos simplemente pedirle a la IA que cree una multitud de 1.000 personas basándose en información que ya fue capturada’", comentó.
"Si no tienes tu multitud habitual de 100, 200 o 500 artistas de apoyo en una gran producción, entonces tampoco necesitas a los asistentes de dirección que los cuidan, ni al personal de peluquería y maquillaje. No necesitas a la gente de vestuario, las pruebas de vestuario, todos los caterings, los conductores y los auxiliares de ubicación. Hay toda una gama de trabajos que la IA efectivamente pone en riesgo".
Imágenes de la actriz generada por IA ‘Tilly Norwood’ han aumentado la preocupación entre los artistas. Fotografía: Reuters
Una bailarina, que habló de forma anónima por temor a que quejarse afecte su trabajo, planteó puntos similares sobre la presión para ser escaneada y el uso de los datos. "Rodar es agotador – te levantas a las 3am", dijo. "Ya son las 8pm y no te dejan irte a casa hasta que lo hayas hecho. La forma en que ocurre, realmente no tienes opción".
"Te preguntas, ¿acaso nos hemos quitado nuestro propio trabajo? Te hace sentir un poco tonto".
Alex Lawrence-Archer, un abogado de derechos de datos del bufete AWO que ha estado trabajando con actores en este tema, dijo que los artistas se ven obstaculizados por un enredo de leyes complicadas y superpuestas. Dijo que es crucial que tengan acuerdos más claros al entrar a una producción, en lugar de intentar recuperar sus datos después.
"Los contratos a menudo están bastante mal redactados, frecuentemente con un wording estándar de la industria que existe desde hace muchos años", explicó. "Realmente no están diseñados con este tipo de tecnologías en mente. Lo que tienes es como un vacío de incertidumbre. En ese vacío, los desarrolladores de IA y los estudios hacen todo lo que pueden salirse con la suya".
"Son las instancias futuras de entrenamiento a las que los actores y sus representantes realmente necesitan prestar atención. Necesitan negociar mejores contratos que sean más claros y que reflejen verdaderamente un acuerdo justo entre actores, estudios y desarrolladores de IA".
Ahora hay señales de una rebelión incipiente. En una filmación reciente, se les dio a los artistas un aviso previo de los escaneos después de que se plantearan preocupaciones.
"El elenco ha estado rechazando colectivamente la atmósfera de emboscar a los actores", dijo uno de los artistas, bajo condición de anonimato. Logramos que incluyeran una especie de addendum en nuestro acuerdo. Básicamente, este les impide utilizar los escaneos digitales para cualquier otra cosa que no sea el programa sin nuestro consentimiento por escrito.
Grabando en Cardiff para el Sr. Burton. Además de los actores, la IA pone en riesgo los empleos de asistentes de dirección, artistas de maquillaje y peluquería, diseñadores de vestuario, personal de guardarropa, caterings, conductores y supervisores de ubicación, comenta un actor secundario. Fotografía: Sarah Lee/The Guardian
La lucha por los derechos frente a la sed de datos de la industria de la IA puede parecer imposible. Estos datos pueden obtenerse de varias grabaciones y fuentes que eluden a los artistas profesionales. Sin embargo, existe un consenso sobre intentar recuperar algo de control.
“Es concebible que la tecnología se use de forma reduccionista, lo que disminuiría drasticamente la necesidad de actores humanos. O podría usarse para beneficiar la creatividad”, dijo Theo Morton, un especialista de cine. “Hay mucha incertidumbre y nadie sabe a ciencia cierta. Por eso es tan importante crear salvaguardas contractuales.”
Williams, sin embargo, es de los que piensan que el control ya se perdió.
La gran incógnita es de dónde vienen exactamente los datos que entrenan los modelos de IA. Lawrence-Archer dijo que eso sigue siendo un secreto muy bien guardado, pero que necesita ser expuesto. También advirtió sobre reducir el problema a una compensación económica para los artistas.
“La industria de la IA depende de grandes cantidades de datos”, afirmó. “Alguien los está recogiendo. Sabemos que estas preguntas son muy sensibles para los desarrolladores de IA y los estudios. Hemos apoyado a actores para que realicen solicitudes de acceso a esos datos, intentando aprender más. Yo conozco personalmente a actores que han sido compensados económicamente por empresas de IA para que retiren esas solicitudes.
“Necesitamos construir un mundo en el que la creatividad humana, la conexión y la actuación de los artistas siga siendo valorada. Si nos centramos solo en lo legal y en la compensación, existe el riesgo de que los actores terminen siendo trabajadores de la economía gig de datos, en lugar de los artistas creativos que son.”
