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Con temperaturas en muchas partes de Alemania que podrían llegar a 30 grados este fin de semana, solo hay una solución: ir a la heladería más cercana.
Pero aunque los precios de una bola de helado no te hagan hervir de ira, sí podrían molestarte un poco, según una encuesta de YouGov encargada por dpa y publicada el sábado.
Casi dos tercios (64%) de los alemanes creen que los precios del helado son demasiado altos, mostró la encuesta realizada a unas 2,000 personas mayores de 18 años.
6 de cada 10 encuestados dijeron que “siempre” o “a veces” piden menos bolas por los precios más altos comparado con hace cinco años. Sin embargo, para el 28%, el precio no afecta cuántas bolas compran. La mayoría pide dos bolas (50%) o tres (23%).
Las bolas cuestan entre 1.30€ y 2.80€.
En algunas regiones de Alemania, el helado está más caro que el año pasado. “Algunas heladerías han subido sus precios”, dijo Annalisa Carnio, portavoz de la Asociación de Fabricantes Italianos de Helado en Alemania (Uniteis).
Pero en general, los precios se mantuvieron estables, ya que la inflación en alimentos ha bajado.
Y los amantes del helado casi no se quejan, según Carnio.
“Los clientes saben que todo está más caro. Algunos protestan, pero son minoría”, dijo.
Uniteis representa los intereses de 900 miembros con unas 2,000 heladerías que hacen su propio helado.