Vitaly Shevchenko
Editor para Rusia, BBC Monitoring
BBC
Las imágenes de satélite sugieren que la propiedad en Zaporiyia ha sido ocupada por soldados rusos.
Fue otro día ajetreado en el trabajo. Las fuerzas rusas habían atacado mi región natal de Zaporiyia otra vez: una región en el sur de Ucrania, dividida entre los invasores rusos, que la reclaman toda como suya, y los ucranianos defensores.
Sentado en mi oficina en el centro de Londres, me sentía nostálgico. Decidí echar un vistazo rápido a las últimas imágenes por satélite de mi pueblo de la infancia – el poeticamente llamado Verkhnya Krynytsya (o Manantial Alto en español), en la parte ocupada por los rusos de la región, a solo unos kilómetros del frente de batalla.
Podía ver los familiares caminos de tierra y las casas hundidas en una vegetación frondosa. Pero algo me llamó la atención.
En medio de la aparente tranquilidad de un pequeño pueblo que recuerdo tan bien, había aparecido algo nuevo: un camino muy usado. Y conducía directamente a la casa de mi infancia.
Las imágenes de satélite muestran que un sendero apareció por primera vez en el verano de 2022, cuatro meses después de que comenzara la ocupación. Imágenes del invierno mostraron que reapareció y que un coche lo usó en enero de 2023.
Solo podía pensar en un grupo de personas que podrían estar usando ese sendero en un pueblo ocupado tan cerca del frente: soldados rusos. Solo ellos tienen razon para andar por ahí en una zona de guerra.
Verkhnya Krynytsya
La verdad es que mi pueblo de la infancia ya no es tranquilo. Verkhnya Krynytsya fue ocupado por Rusia poco después del comienzo de la invasión a gran escala en febrero de 2022.
Para entonces, mi antigua casa probablemente estaba vacía. Mi familia la vendió hace mucho tiempo, pero yo visitaba Verkhnya Krynytsya al menos una vez al año antes de que fuera ocupado, y veía la casa aparentemente abandonada, con el jardín descuidado.
Vitaly Shevchenko/BBC
Una foto de la casa de la infancia de Vitaly en 2017, antes de la invasión a gran escala de Rusia.
No era nada sorprendente: el pueblo era pequeño y tranquilo en los mejores tiempos, y para cualquiera que aún no estuviera jubilado, buscar trabajo significaba mudarse a otro sitio.
Pero mucha gente se quedó, y más de mil personas aún estaban allí cuando Rusia lanzó su invasión. Dos días después, las autoridades ucranianas repartieron 43 fusiles Kalashnikov para ayudar a los aldeanos a luchar contra los rusos.
En una reunión comunitaria, los residentes decidieron no usarlos contra los invasores. Un mes después, el jefe del pueblo, Serhiy Yavorsky, fue capturado por los rusos, quienes lo golpearon y torturaron con electricidad, agujas y ácido, según testimonios presentados en un tribunal ucraniano.
Los rusos también apuntaron a una planta de tratamiento de aguas residuales fuera del pueblo y establecieron un puesto de mando allí una vez que los ucranianos abandonaron las instalaciones.
Incluso los alrededores del pueblo han cambiado irreversiblemente.
Antes de la invasión a gran escala de Rusia, Verkhnya Krynytsya estaba situado en el hermoso embalse de Kajovka, que era tan vasto que solíamos llamarlo "el Mar".
Se podía ver desde casi cualquier lugar del pueblo. Era donde los lugareños iban a nadar en verano y donde los visitantes de toda la región venían en invierno para pescar en el hielo. Uno de mis primeros recuerdos es de mujeres locales cantando canciones folclóricas ucranianas mientras el sol se ponía en el Kajovka en una cálida tarde de verano.
El Mar desapareció después de que la presa de Kajovka fuera destruida en junio de 2023, lo que provocó inundaciones devastadoras que arruinaron hogares y tierras de cultivo.
Para saber cómo son ahora las condiciones en Verkhnya Krynytsya, intenté contactar con los lugareños.
Como era de esperar, obtener respuestas fue muy difícil.
Muchos se han ido, y los que aún están en el pueblo – como ocurre en otras partes ocupadas de Ucrania – tienen miedo de hablar con los medios de comunicación. Las ubicaciones en el frente son lugares particularmente sin ley, donde la represalia de las fuerzas rusas puede ser rápida y brutal.
Los grupos de redes sociales sobre Verkhnya Krynytsya guardaron silencio después de que fuera ocupado, y las preguntas que publiqué allí quedaron sin respuesta.
Pedirle a alguien que fuera a echar un vistazo a mi casa estaba fuera de cuestion. Lo que solía ser un pueblo pacífico y tranquilo se ha convertido en una zona de miedo.
El peligro en Verkhnya Krynytsya también viene del cielo. La proximidad del pueblo a la línea del frente significa que es un lugar peligroso, expuesto a frecuentes ataques aéreos de los ucranianos.
Un conocido me dijo que los lugareños preferían permanecer en sus casas por miedo a ser alcanzados por drones. "Allí es muy peligroso", me dijeron. "Están activos y pueden apuntar a ti, a tu casa o a tu coche. Nuestro pueblo ha cambiado mucho, Vitaly."
Nuevos residentes
Entonces, dado el peligro y la devastación causados a Verkhnya Krynytsya por la guerra, ¿quién podría haber hecho las marcas de neumáticos que van y vienen de mi antigua casa?
Es muy poco probable que alguien elija mudarse al pueblo ahora, con la excepción de los soldados rusos.
Muchos de ellos se mudaron a casas vacías después de capturar Verkhnya Krynytsya. En junio de 2022, las autoridades de Zaporiyia dijeron que tenían información de que las tropas rusas se estaban quedando en el pueblo. Es entonces cuando las imágenes de satélite muestran por primera vez señales del sendero en mi antigua casa.
Para comprobar si estaba en lo cierto al suponer que los soldados rusos probablemente se habían mudado a mi antigua casa, me puse en contacto con la 128.ª Brigada Mecanizada Pesada Separada de Ucrania, que participa en operaciones en la zona.
"No te equivocas. Es extremadamente probable", me dijo su portavoz, Oleksandr Kurbatov.
Me dijo que, mientras los lugareños huyen de las áreas del frente, están siendo reemplazados por militares rusos.
"Si no hay suficientes casas vacías, la demanda es muy alta. Por supuesto, generalmente es personal militar del ejército de ocupación", me contó.
Como nadie en el pueblo estaba dispuesto a arriesgarse a mirar mi casa, le pedí a mi colega de BBC Verify, Richard Irvine-Brown, que obtuviera y analizara imágenes recientes de satélite. Mostraron un patrón de movimiento alrededor de la casa donde crecí.
No había señal de un camino hacia la propiedad en marzo de 2022, un mes después de la invasión.
Aparte del tenue sendero visto en dos imágenes de satélite en junio, la propiedad parecía ignorada. Luego el sendero reapareció en diciembre, y se vio un coche usándolo en enero de 2023. No tenemos más imágenes de la propiedad hasta agosto, cuando el camino ya estaba bien establecido.
El sendero se desvanece y reaparece con las estaciones, lo que muestra que quien lo usa solo lo hace periódicamente.
Parece que la propiedad está siendo utilizada durante el invierno, y probablemente por soldados rusos, que han estado ocupando propiedades vacantes. Esto es plausible, ya que los inviernos ucranianos pueden ser tan fríos que es imposible para los hombres o sus suministros permanecer en trincheras, viviendas improvisadas y almacenamiento.
Puede que pase mucho tiempo antes de que se sepa la verdad sobre lo que le pasó a mi casa; ciertamente no mientras el pueblo esté bajo ocupación.
Por ahora, parece que mi antiguo hogar se ha convertido en un pequeño engranaje en la gran maquinaria de la guerra de Rusia en Ucrania.
Con contribuciones de Richard Irvine-Brown.