¿Estamos presenciando el desenlace de la coalición entre el Partido Popular y Vox? Vegara y Mestre: ¿qué harán ahora? Como líderes de este gobierno, ¿qué van a hacer? ¿Qué es peor: pagar a la gente por no trabajar o pagarles para socavar activamente los cimientos de Orihuela Costa y el municipio en su conjunto?
Aristóteles dijo una vez: “El hombre es el dueño de su silencio y esclavo de sus palabras”. Sin embargo, el silencio de ambos es ensordecedor. ¿Dónde están las palabras de compromiso que una vez hicieron con Orihuela Costa?
Antes de las últimas elecciones, el alcalde Pepe Vegara afirmó que el mayor problema en Orihuela era la mala gestión, especialmente en Orihuela Costa. Para solucionar esto, estableció el Ayuntamiento de Orihuela Costa y nombró a Mestre como Primer Teniente de Alcalde. Pero, ¿ha funcionado esta solución? Claramente no.
Ahora, con casi dos años antes de las próximas elecciones, Vegara ha comenzado su campaña temprano, esperando comprar votos. Sabe que muchas personas están enojadas, no solo en la Costa, sino también en otras pedanías, sin embargo, apuesta a que olvidarán las promesas incumplidas y volverán a votar ciegamente. Es un ciclo vicioso: elegir, ignorar, repetir.
Para Vegara y Mestre: recuerden que no hay mayor fraude que una promesa no cumplida. No hablen, actúen. No afirmen, prueben. Exigimos acciones reales, no palabras vacías. Queremos un trato igualitario, presupuestos justos y un gobierno que respete a todas las áreas por igual. Orihuela Costa no es una colonia para ser saqueada en beneficio del centro de la ciudad.
Orihuela sigue atrapada en una mentalidad medieval, un pueblo antiguo con actitudes antiguas. El liderazgo político se comporta como la realeza, sentado en tronos, mirando hacia abajo a la Costa. Esto debe terminar.
El problema real no es la ideología, es el interés propio. Cuando los políticos se enfocan en su propio beneficio en lugar de servir al pueblo, la corrupción florece. Eso es lo que debe cambiar.
Y hablemos de mentiras. Funcionan porque la gente quiere creer en ellas. Cuanto más grande es la mentira, más convincente se vuelve, repetida lo suficiente, se convierte en “verdad”. Este es el juego que se está jugando y insulta la inteligencia de cada votante.
Algunos recordatorios para el Sr. Mestre, de sus propias declaraciones previas a las elecciones:
“Debemos reducir todos los impuestos municipales a familias, empresas y comerciantes”.
“Eliminaremos el gasto innecesario en asesores del Ayuntamiento”.
“Orihuela no puede permitirse otro alcalde con problemas judiciales”.
¿Se han cumplido esas promesas? ¿O simplemente han sido olvidadas?
En este momento, el gobierno de Vegara y Mestre parece vacío, carente de ideas, visión o la integridad para liderar. Orihuela merece algo mejor.