El gobierno no descarta un "impuesto a la riqueza" después de que el exlíder laborista Neil Kinnock lo propusiera para ayudar a las finanzas del Reino Unido.
Lord Kinnock, quien fue líder laborista entre 1983 y 1992, dijo en Sunday Morning With Trevor Phillips de Sky News que un impuesto del 2% sobre activos valorados en más de 10 millones de libras generaría hasta 11 mil millones anuales.
Este lunes, el portavoz del primer ministro Keir Starmer no confirmó ni negó si el gobierno implementará un impuesto específico para los más ricos. Preguntado varias vezes, respondió: "El gobierno está comprometido con que los más adinerados paguen su parte en impuestos. El primer ministro ha dicho que quienes tienen más deben cargar con más."
También mencionó que el gobierno cerró lagunas fiscales para "non-doms", gravó jets privados y destacó que el 1% más rico paga un tercio de los impuestos.
La canciller Rachel Reeves había insistido este año en que no impondría un impuesto a la riqueza en su presupuesto otoñal, algo que ya dijo en 2023 antes de que Labour ganara las elecciones.
El domingo, Lord Kinnock declaró: "No resolverá todo, pero este impuesto haría dos cosas: recaudar recursos y demostrar que somos un gobierno de equidad. La gente está harta de que los mismos siempre salgan beneficiados mientras otros pagan más por servicios peores. Un gesto hacia la justicia marcaría la diferencia."
Hijo de un minero y miembro de la Cámara de los Lores desde 2005, Kinnock señaló que los valores de los activos se dispararon en 20 años, mientras economías e ingresos se estancaron.
Tras una semana difícil para Starmer, quien diluyó un recorte a ayudas sociales para ahorrar 5.5 mil millones, los ahorros fiscales de la canciller se redujeron.
El ministro Stephen Morgan declaró: "Creo en que los que más tienen paguen más impuestos. Ya gravamos jets privados y ganancias de energéticas."