George Simion ganó de manera contundente con el 40% de los votos en la polémica segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Rumania este domingo y, por lo tanto, se convierte en el claro favorito para ganar la presidencia del estado en dos semanas, con el 98% de los votos contados.
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Detrás del líder del Partido Euro-Crítico y Nacionalista AUR, el segundo puesto está disputado, y con él la clasificación a la decisiva segunda vuelta el 18 de mayo, compitiendo Crin Antonescu de la Coalición y el Independiente Nicusor Dan, actual alcalde de Bucarest.
Poco después del recuento de votos, Antonescu, candidato de la coalición gobernante de socialdemócratas, liberales y la minoría húngara, obtiene el 20.6%, mientras que Dan suma el 20.7%.
Sin embargo, estos datos aún no incluyen el voto de la diáspora rumana, lo que mantiene la competencia por el segundo puesto abierta, que significa el pase a la vuelta decisiva.
El Tribunal Constitucional decidió en diciembre pasado anular el proceso electoral que comenzó el 24 de noviembre de 2024 debido a una presunta interferencia externa de Rusia en las redes sociales a favor del entonces candidato Calin Georgescu.
Tras la descalificación de Georgescu por no cumplir con los requisitos legales para participar en la reelección, Simion se autodenominó “heredero político” de Georgescu.
El político rumano de 38 años se presenta como defensor de los valores tradicionales y la identidad rumana, utilizando una retórica nacionalista, religiosa y populista que resuena especialmente entre los votantes jóvenes, rurales y menos educados.
Sus propuestas incluyen proteccionismo económico, normalización con Moldavia y suspensión de la ayuda militar a Ucrania, buscando una tregua en el conflicto con Rusia. Simion se presenta como el sucesor político de un ultranacionalista pro-ruso, insinuando posibles vínculos y financiamiento extranjero para su campaña.
El líder de AUR, de origen humilde, admira a Donald Trump imitando su estilo, retórica y estrategia política, incluyendo el uso de consignas como “Rumania primero”. Simion, con experiencia en el sector empresarial, ha sido una figura polarizante en la política rumana durante más de una década.
Simion fundó ‘Action 2012’, una plataforma que promueve la Unión de Rumania y Moldavia, liderando diversas manifestaciones en ambos países.