Un donante anónimo está donando 130 millones de dólares (100 millones de libras) al Pentágono para ayudar a pagar a las tropas estadounidenses durante el cierre del gobierno, lo cual genera preocupaciones éticas.
Funcionarios de defensa de EE. UU. confirmaron el regalo, que según el presidente Donald Trump compensará los faltantes en el pago a los 1.32 millones de miembros del servicio del país, pero declaron revelar la identidad del donante.
Sin embargo, Trump ha dado algunas pistas, diciendo el sábado que “es un gran partidario mío” y que es un ciudadano estadounidense.
El gobierno cerró hace más de tres semanas, después de que los legisladores no aprobaron un acuerdo de financiación. La administración Trump pagó a las tropas la semana pasada desviando 8 mil millones de dólares de la investigación militar, pero no está claro qué pasará en el próximo día de pago a fin de mes.
Ahora en su día 25, el cierre está a punto de convertirse en uno de los más largos en la historia de EE. UU.
“La donación se hizo con la condición de que se usara para cubrir el costo de los salarios y beneficios de los miembros del servicio”, dijo el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, a los periodistas el viernes, agregando que el dinero estaba permitido bajo la “autoridad general de aceptación de regalos” del departamento.
Trump había anunciado la donación el jueves, mientras también se negaba a identificar al donante, diciendo: “él realmente no quiere el reconocimiento”.
Antes de salir hacia Asia el sábado, Trump dijo a los periodistas en la Casa Blanca que el donante es “un gran caballero”, “un patrón”, un “patriota” y un “hombre maravilloso” que “no quiere publicidad”.
“Prefiere que su nombre no sea mencionado, lo cual es bastante inusual en el mundo del que yo vengo”, dijo Trump. “En el mundo de la política quieres que mencionen tu nombre.”
“Él aportó 130 millones de dólares para asegurarse —eso es mucho dinero— de que los militares recibieran su pago, y es un gran partidario mío”, continuó.
Los fondos equivalen a aproximadamente 100 dólares por cada miembro del servicio.
Aunque la Casa Blanca pudo reasignar fondos de defensa para pagar a las tropas la semana pasada, queda por ver qué sucederá en el próximo día de pago para los militares, el 31 de octubre. El Congreso no ha podido aprobar un proyecto de ley que mantendría los pagos a las tropas durante el cierre.
La mayoría de los trabajadores gubernamentales han sido suspendidos, o en algunos casos, se les ha dicho que trabajen sin pago mientras dura el cierre.
Según las reglas del departamento de defensa, las donaciones superiores a 10,000 dólares deben ser revisadas por funcionarios de ética “para determinar si el donante está involucrado en algún reclamo, acción de adquisición, litigio u otros asuntos particulares que involucren al Departamento que deban considerarse antes de aceptar el regalo”.
Las donaciones de ciudadanos no estadounidenses requieren un escrutinio adicional.
Aunque es inusual, el Pentágono a veces acepta regalos de donantes, pero normalmente deben destinarse a financiar proyectos específicos, como una escuela, hospital, biblioteca, museo o cementerio.
Los críticos cuestionaron por qué los militares estadounidenses aceptarían fondos anónimos.
“Usar donaciones anónimas para financiar a nuestro ejército plantea preguntas preocupantes sobre si nuestras propias tropas corren el riesgo de ser literalmente compradas y pagadas por potencias extranjeras”, dijo el senador de Delaware Chris Coons, el principal demócrata en el subcomité de asignaciones de defensa del Senado.