Los Indiana Pacers aplastaron a Oklahoma City Thunder 108-91 en el Juego 6 de las Finales de la NBA para llevar la serie a un partido decisivo.
Obi Toppin anotó 20 puntos y Andrew Nembhard agregó 17 para forzar el primer Juego 7 desde 2016, que se jugará el domingo por la noche en Oklahoma City.
El Juego 6 fue como un resumen de la temporada de Indiana: comenzaron la temporada regular con 15 derrotas en 25 partidos, lograron cinco remontadas de 15 o más puntos en estos playoffs y están a una victoria del título.
"Solo queríamos proteger nuestra cancha," dijo Tyrese Haliburton, quien jugó con una lesión en la pantorrilla y anotó 14 puntos. "No queríamos verlos celebrar un campeonato aquí. Con la espalda contra la pared, respondimos. Fue un esfuerzo de todo el equipo."
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Por primera vez en nueve años, las Finales de la NBA se decidirán en un Juego 7.
Los Pacers dominaron 64-42 después del segundo cuarto y no miraron atrás, mientras los Thunder sufrieron su segunda mayor derrota de la temporada.
Su peor derrota también fue en los playoffs: un hoyo de 45 puntos contra Minnesota en las finales de la Conferencia Oeste. Los Thunder remontaron esa serie, claramente, y ahora necesitarán esa capacidad de recuperación una vez más.
"Obviamente, fue un muy mal desempeño por nuestra parte," dijo el entrenador Mark Daigneault.