Los fieles católicos comenzaron a visitar la tumba del Papa Francisco el domingo, pasando junto a la simple tumba blanca dentro de la Basílica de Santa María la Mayor en Roma un día después de despedirse.
Una sola rosa blanca fue colocada en la tumba que decía “Franciscus” – el nombre del papa en latín – dentro de Santa María la Mayor, donde el difunto pontífice solía rezar después de regresar de sus viajes al extranjero.
Una vista de la tumba del Papa Francisco en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, Italia, el 27 de abril de 2025.
Rosario Correale, de Salerno, Italia, fue uno de los que visitaron la tumba. Dijo que experimentó “gran emoción” al presenciar el lugar de descanso final de Francisco.
“Veo que todas las personas están realmente conmovidas”, dijo. “Realmente nos ha dejado una marca”.
La gente pasaba, muchos se persignaban o tomaban fotos con sus teléfonos. Los ujieres les instaban a seguir adelante para dar cabida a los miles que acudieron a la basílica de Roma para ver la tumba, formando una larga fila afuera.
“El Papa Francisco para mí fue una inspiración, un guía”, dijo Elías Caravalhal.
Caravalhal vive en Roma pero no pudo rendir homenaje a Francisco cuando el cuerpo estaba en estado de reposo en la Basílica de San Pedro después de su muerte el Lunes de Pascua a la edad de 88 años. Dijo que visitó la tumba “para darle las gracias por lo que ha hecho”.
La tumba se abrió en el segundo de los nueve días de luto oficial por Francisco, tras los cuales se celebrará un cónclave para elegir al próximo papa.
“Poder ver al papa y su lápida hoy, fue realmente hermoso”, dijo Amaya Morris, una turista de Los Ángeles, California. “Me pareció increíble que quisiera ser enterrado aquí en esta basílica. De todas, eligió esta”.
También se celebró una misa especial en la Plaza de San Pedro el domingo por el Cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano. Parolin es considerado un posible candidato a ser el próximo papa debido a su prominencia en la jerarquía católica.
“El pastor que el Señor dio a su pueblo, el Papa Francisco, ha terminado su vida terrenal y nos ha dejado”, dijo Parolin en su homilía, pronunciada el primer domingo después de Pascua. “El dolor por su partida, el sentimiento de tristeza que nos asalta, la conmoción que sentimos en nuestros corazones, el desconcierto: Estamos experimentando todo esto, al igual que los apóstoles que lloraban la muerte de Jesús”.
La misa fue asistida por una multitud estimada en 200,000 personas, entre ellas muchos jóvenes que originalmente vinieron a Roma para lo que debía ser la canonización del primer santo milenario, Carlo Acutis, durante días santos especiales dedicados a los adolescentes.
Muchos de los que lloraban al difunto papa también expresaron ansiedad sobre quién será elegido para liderar la Iglesia.
“Terminó transformando la Iglesia en algo más normal, más humano”, dijo Romina Cacciatore, 48 años, una traductora argentina que vive en Italia. “Estoy preocupada por lo que viene”.
Todavía no se ha fijado una fecha para el cónclave, pero se espera que comience entre el 5 y el 10 de mayo. Cerca de 135 cardenales de todo el mundo que viajaron a Roma para el funeral de Francisco se reunirán regularmente esta semana antes del cónclave mientras comienzan a trazar un camino a seguir para la Iglesia Católica, que cuenta con 1.4 mil millones de fieles.
El cardenal alemán Reinhard Marx dijo a los periodistas el sábado que el cónclave duraría solo “unos pocos días”, informó AFP.
Marx dijo que el debate sobre el próximo papa estaba abierto, agregando: “No se trata de ser conservador o progresista… El nuevo papa debe tener una visión universal”.