Lady Annabel Goldsmith, musa del icónico nightclub londinense Annabel’s.
Crédito: X -@In___Memoriam
Lady Annabel Goldsmith, la mujer que inspiró uno de los nightclubs más icónicos de Londres y protagonizó una vida que definió el glamour, la resiliencia y la reinvención, ha fallecido a los 91 años.
De orígenes aristocráticos a leyenda de la noche londinense
Lady Annabel Goldsmith – la mujer tras el nombre del legendario nightclub Annabel’s – ha muerto a la edad de 91 años. Su familia confirmó la noticia, describiéndola como ‘simplemente irreemplazable’.
Nacida Annabel Vane-Tempest-Stewart en 1934 en el seno de una familia aristocrática anglo-irlandesa, era hija del vizconde Castlereagh, posteriormente VIII marqués de Londonderry. Se convirtió en Lady Annabel en 1949 cuando su padre heredó el título – un momento que marcó el inicio de una vida transcurrida entre las élites británicas.
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Su primer marido, el empresario Mark Birley, inauguró Annabel’s en 1963 y le puso su nombre. El local se convirtió en uno de los clubes más exclusivos de Londres, atrayendo a la realeza, estrellas del rock y figuras de la alta sociedad. En el corazón de Mayfair, fue el lugar donde la aristocracia se codeó con celebridades – desde la princesa Margaret hasta Frank Sinatra – y donde Lady Annabel se erigió en símbolo del glamour y la sofisticación de toda una época.
Una familia vinculada a la política, la filantropía y la fama
La vida de Lady Annabel se extendió mucho más allá del ambiente festivo londinense. Con Mark Birley, tuvo tres hijos – Rupert, Robin e India Jane – antes de contraer segundas nupcias con el financiero Sir James Goldsmith en 1978. Juntos, tuvieron a Jemima, Zac y Ben.
Sus hijos se convirtieron en figuras públicas por derecho propio: Jemima, periodista y productora conocida por su matrimonio con el ex primer ministro pakistaní Imran Khan; Zac, el exdiputado conservador y candidato a la alcaldía de Londres; y Ben, ecologista y financiero.
Un legado de elegancia, empatía y activismo
Aunque más conocida por su vida social, Lady Annabel también estuvo profundamente involucrada en la filantropía. Fue una firme defensora de causas relacionadas con el medio rural, el bienestar animal y los niños afectados por el VIH/sida en Sudáfrica.
En 2004, publicó sus memorias, *Annabel: An Unconventional Life*, un relato reflexivo de su extraordinario trayecto vital — desde una infancia privilegiada hasta el corazón del “Londines de la swingin’ London”, y más tarde, sus años serenos como matriarca y abuela.
Quienes la conocieron la describen como una mujer elegante, ocurrente y fieramente leal – capaz de transitar con igual soltura entre las soirées del Palacio de Buckingham y los actos benéficos por la conservación en la campiña inglesa.
Mientras llegan los homenajes, Lady Annabel Goldsmith será recordada no solo como una gran dama de su tiempo, sino como una mujer cuya vida abarcó la tradición y la transformación – dejando tras de sí un legado tan perdurable como el nightclub que aún lleva su nombre.