Las familias de Baleares desembolsan un promedio de 1.293 euros por alumno para su educación, una cantidad que, si bien aún representa un gasto significativo, se situa muy por debajo de la media nacional española de 2.056 euros, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
En total, los hogares insulares invirtieron 426,6 millones de euros en escolarización durante el curso académico 2023-24. La mayor parte se destinó a servicios como tasas de matrícula y clases de apoyo (896 euros), mientras que 397 euros se gastaron en material escolar, ropa, tecnología y libros de texto.
Los alumnos de primaria resultaron ser los más costosos, con un gasto de 1.656 euros por cada uno, en comparación con los 1.037 euros para los estudiantes de secundaria.
A nivel nacional, el coste de la educación se ha disparado casi un 25% desde 2020. La enseñanza privada es, con diferencia, la más cara —alcanzando los 6.352 euros por alumno—, mientras que los centros concertados suponen un gasto de 1.604 euros, y la escuela pública apenas 837 euros.
LECTURA ADICIONAL:
Los padres también destinaron una considerable suma a comedor escolar (809 euros), clases particulares (546 euros), así como a transporte e internado (1.118 euros). ¿El mayor desembolso en productos? Tecnología (199 euros) y libros de texto (190 euros).
Asimismo, se ha registrado un auge en la educación no reglada, con familias gastando miles de millones en clases de idiomas, arte y preparación de exámenes, especialmente para menores de 15 años y adultos de entre 25 y 44 años.
En Baleares, las facturas podrán ser menores, pero para los padres que lidian con la subida de precios y niños en crecimiento, la vuelta al cole sigue suponiendo un quebranto para el presupuesto familiar.
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