Por Jon Clarke y Walter Finch
La empresaria de la moda expatriada, Jody Smart, ha visto rechazado su recurso de apelación contra la condena por fraude relacionado con su participación en el escándalo de pensiones de Continental Wealth Management.
A pesar de estar implicada en el masivo fraude de 35 millones de euros que hizo que cientos de expatriados, en su mayoría británicos en España, perdieran gran parte o incluso la totalidad de sus pensiones en 2017, Smart había logrado hasta ahora eludir la cárcel.
No obstante, la justicia finalmente alcanzó a la que fuera fashionista y wedding planner cuando un tribunal de Alicante la declaró culpable de fraude el pasado mes de abril.
Este juicio, de menor envergadura, se centró en un conjunto limitado de cargos presentados por solo tres víctimas de CWM, después de que un proceso anterior que intentaba perseguir el fraude en su totalidad se hubiera suspendido en 2023.
Dada la naturaleza más sencilla del caso, el juez la declaró culpable con celeridad. Se le ordenó indemnizar a las víctimas con un total de 370.000 euros y cumplir una pena de cuatro años y tres meses de prisión.
La estafadora expatriada Jody Smart ha perdido su apelación contra una sentencia de cuatro años de cárcel.
Sin embargo, la celebración entre las numerosas víctimas de CWM fue moderada cuando Smart apeló el veredicto, lo que le granjeó unos meses más de libertad —hasta ahora—.
“Es excelente que el Tribunal Superior de Justicia de Valencia haya ratificado la sentencia; significa que a Jody solo le queda un paso para la cárcel,” declaró a The Olive Press el abogado Carlos Coll Miralles, representante de las víctimas.
“Pero, en definitiva, tener que pasar cuatro años y medio en prisión es lo mínimo que se merece.”
“La verdad es que me entristece que el caso siga arrastrándose tras todos estos años. Y solo estaré feliz cuando finalmente pague a mis clientes en su totalidad.”
El juez escuchó cómo Smart estafó deliberadamente a una víctima, Tim Benjamin, embolsándose 300.000 euros por una propiedad que jamás existió.
Una segunda víctima, Sally Anne Hodgson, fue engañada para que prestara 70.000 euros a la empresa de Smart bajo falsas promesas de reembolso, antes de que la compañía quebrara semanas después.
Pero el caso más trágico fue el de Mark Davidson, a quien estafaron 800.000 euros y quien falleció antes de que se emitiera el veredicto.
La glamourosa fashionista cumplirá condena finalmente por su papel en el escándalo de pensiones de CWM que devastó a cientos de expatriados, mayoritariamente británicos.
“Se apropió de millones y destruyó muchas vidas, por lo que su sentencia es un precio muy pequeño a pagar,” prosiguió Coll.
Ahora, a Smart le quedan escasas opciones para volver a apelar —esta vez ante el Tribunal Supremo en Madrid—.
Debe presentar los escritos antes del 27 de octubre, aunque Coll duda que incluso Smart intente algo tan palmariamente fútil.
“Ahora tiene unos días para recurrir, pero no veo ni un solo motivo por el cual pueda tener éxito allí,” afirmó el letrado.
“No ha cambiado nada y, además, le va a costar más dinero, que alega no tener.”
Añadió: “Pero estoy seguro de que ha ocultado mucho en paraísos fiscales offshore.”
El abogado, con despacho en Ondara, Alicante, continúa: “El problema es localizar el dinero. Es difícil embargar bienes a su nombre… No logro encontrar nada.”
“Ha puesto las cosas muy difíciles para reclamarle el dinero y no creo que pague voluntariamente.”
La ex empresaria de la moda había declarado previamente a The Olive Press que apelaba sobre la base de que su firma ‘no figuraba en ningún préstamo entre particulares’.
El juicio fue una derivación del notorio escándalo de CWM, que devastó la vida de numerosos expatriados tras su colapso hace ocho años.
Se determinó que Smart era la única administradora de una empresa llamada Continental Wealth Trust, mientras que el tribunal también señaló a su entonces pareja, Darren Kirby, como partícipe del esquema.
Se constató que Kirby era el único administrador y socio de CWM, antes de que esta se reformara como CWT.
Increíblemente, al menos media docena de otros empleados y altos cargos también han logrado hasta ahora evadir la justicia.
Un tribunal diferente en Denia falló en 2023 que no había ‘suficientes evidencias’ para procesar a cuatro ejecutivos, una decisión que devastó a las víctimas.
El abogado de Smart procedió a defender su estilo de vida glamuroso, que, según dijo, era ‘fruto de años de duro trabajo’.
Insistió en que ‘no debería haber objeción alguna a cómo mi cliente gastaba su dinero’.
Su popular restaurante en Benissa, Oceania, es ‘un negocio que genera empleo y valor añadido y no tenía nada que ver con el procedimiento judicial’.
Varios casos civiles también siguen su curso en el sistema legal de la Isla de Man.
Smart no estuvo disponible para hacer declaraciones cuando The Olive Press intentó contactar con ella.
Haga clic aquí para leer más Noticias de la Costa Blanca de The Olive Press.
