Estados Unidos ha declarado oficialmente a Colombia como un país que ha “fracasado demostrablemente” en cumplir con sus obligaciones de controlar el narcotráfico, pero se detuvo antes de cortar el flujo de ayuda estadounidense a Colombia.
Cada año, el gobierno de EE.UU. certifica formalmente si varios países cooperan plenamente con los esfuerzos contra las drogas liderados por ellos. Aquellos que no cumplen se arriesgan a que se les corte la financiación.
El lunes, la administración Trump dijo que la producción de cocaína en Colombia había aumentado a niveles históricamente altos bajo su presidente izquierdista, Gustavo Petro, algo que el líder colombiano negó.
En respuesta, el gobierno colombiano dijo que dejaría de comprar armas de EE.UU.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, dijo a la radio local que su gobierno detendría la compra de armas estadounidenses “desde este momento”.
Los otros países que, según EE.UU., no cumplieron sus objetivos fueron Afganistán, Bolivia, Myanmar y Venezuela.
Colombia fue agregada a la lista por primera vez desde 1997.
Es probable que la medida enfrie aún más las relaciones entre su gobierno de izquierda y la administración Trump.
El presidente Petro utilizó las redes sociales para responder a la acusación estadounidense de que durante su mandato, el área cultivada con arbustos de coca y la producción de cocaína habían alcanzado niveles récord.
Las hojas de coca son el ingrediente clave de la cocaína y Colombia ha sido durante mucho tiempo el principal productor de esta droga ilegal.
Una encuesta de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) encontró que el cultivo de arbusto de coca había aumentado en un 10% en 2023. Las cifras para 2024 se publicarán el próximo mes.
Pero Petro insistió en que fue durante el gobierno de Iván Duque, su predecesor que gobernó desde 2018 hasta 2022, que el área sembrada con coca vio grandes incrementos.
Según cifras publicadas por la presidencia colombiana, las fuerzas de seguridad del gobierno incautaron un récord de 1,764 toneladas de cocaína entre agosto de 2022, cuando Petro asumió el cargo, y noviembre de 2024. Los decomisos de drogas han continuado a un alto nivel en 2025, sugieren cifras oficiales.
Petro también dijo que para que el cultivo de coca disminuya, lo que se necesita es que la demanda de cocaína baje en EE.UU. y en Europa.
Por otro lado, EE.UU. echó la culpa firmemente a Petro, diciendo que las conversaciones de paz del presidente con varios grupos armados (muchos de los cuales se financian mediante el narcotráfico) habían obstaculizado la lucha contra las drogas.
“Sus intentos fallidos de buscar acuerdos con grupos narco-terroristas solo empeoraron la crisis”, dijo la determinación presidencial presentada al Congreso de EE.UU.
El documento continúa elogiando la “habilidad y valentía” de las fuerzas de seguridad de Colombia al enfrentar a grupos criminales.
Luego concluyó que “el fracaso de Colombia en cumplir con sus obligaciones de control de drogas durante el año pasado recae únicamente en su liderazgo político”.
Sin embargo, deja la puerta abierta para recertificar a Colombia si su gobierno “toma medidas más agresivas para erradicar la coca y reducir la producción y el tráfico de cocaína”.
Y aunque la retórica proveniente de Washington claramente enfureció al presidente Petro, su gobierno también se sentirá aliviado de que la descertificación no resultara en un corte de la ayuda estadounidense, dice el corresponsal de BBC News Mundo en Bogotá, José Carlos Cueto.
La descertificación de Colombia llega en un momento en que el presidente Trump ha hecho de la lucha contra los “narco-terroristas” una prioridad.
El lunes anunció que el ejército estadounidense había destruido un presunto barco narcotraficante venezolano en aguas internacionales del Caribe Sur.
Tres personas murieron en el ataque, dijo Trump.
Añadió que EE.UU. tenía pruebas grabadas de que los botes pertenecían a grupos narco-terroristas, pero aún no ha hecho pública esa evidencia.
Con reportaje adicional de Luis Fajardo, especialista para América Latina de BBC Monitoring.
