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El riesgo de avalanchas en la zona ha alcanzado el nivel 4+, clasificado como muy alto. Crédito: Robert Harding. Shutterstock
Una tormenta de nieve sin precedentes para esta época del año ha golpeado con fuerza gran parte de los Alpes, creando un escenario caótico: estaciones de esquí cerradas, pueblos incomunicados, cortes generalizados de energía eléctrica y un riesgo de avalanchas extremo.
Con acumulaciones de nieve que ya superan los dos metros en áreas más altas, esto se perfila como uno de los eventos climáticos más severos de la temporada —y quizás de los últimos años— en esta región montañosa.
Los puertos de montaña italianos de Simplon y Gran San Bernardo han sido cerrados debido a la fuerte nevada. En las regiones de Monte Rosa y Cervinia, la intensa nevada continúa y se espera que la tormenta siga activa en las próximas horas.
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El epicentro de la tormenta ha estado en la ciudad suiza de Zermatt, donde ha caído más de un metro de nieve en el nivel del pueblo, obligando al cierre de todo acceso por carretera y ferrocarril. La conexión ferroviaria con Visp fue suspendida y se han cortado los suministros eléctricos en amplias zonas, afectando a miles de residentes y turistas.
Dieciocho hoteles han sido conectados parcialmente a energía de emergencia y se ha lanzado una operación de distribución de alimentos para la población.
Las autoridades locales han lanzado un llamamiento urgente: “No viajen a la región, quédense en casa y eviten usar las carreteras”. El riesgo de avalanchas en la zona ha alcanzado el nivel 4+, clasificado como muy alto.
Una tormenta de nieve alpina rara
En Francia, la fuerte nevada ha dejado más de 1,2 metros en áreas como Val d’Isère y Tignes, obligando a ambos complejos turísticos de esquí a cerrar por completo. El ayuntamiento de Tignes implementó medidas de confinamiento en el hogar, prohibiendo el movimiento entre vecindarios y suspendiendo el transporte escolar.
En partes de la región de Saboya, incluidas Haute-Maurienne y Haute-Tarentaise, el riesgo de avalanchas ha alcanzado el nivel 5/5 —el más alto posible. Se han reportado más de 4,000 hogares sin suministro eléctrico, junto con deslizamientos de tierra, árboles caídos y cierres de rutas clave como la D902. Incluso la renombrada Mega Bell Course en La Plagne fue cancelada por razones de seguridad.
Las autoridades meteorológicas advierten que esta tormenta ha sido desencadenada por una combinación inusual de sistemas meteorológicos atlánticos y mediterráneos, resultando en una nevada excepcional en los Alpes occidentales, especialmente en la zona fronteriza entre Suiza, Francia e Italia.
En la cima de la Aiguille du Midi, a 3,842 metros sobre el nivel del mar, se han acumulado más de dos metros de nieve húmeda, lo que ha llevado a restricciones de acceso para esquiadores, con la entrada limitada solo a peatones. En Verbier y Crans-Montana (Suiza), así como en Val Cenis y Bonneval-sur-Arc (Francia), también se han reportado grandes acumulaciones y condiciones peligrosas.
Los expertos advierten que, aunque la tormenta puede disminuir en los próximos días, el peligro persistirá. El Instituto Suizo de Investigación de la Nieve y las Avalanchas ha advertido que todas las actividades en la montaña fuera de áreas seguras están fuertemente desaconsejadas.
Recomendaciones oficiales:
Evitar cualquier viaje no esencial a las áreas montañosas afectadas.
• No aventurarse fuera de las pistas marcadas.
• Seguir estrictamente las instrucciones emitidas por las autoridades locales.
• Consultar los boletines de avalanchas antes de planificar cualquier actividad en la nieve.
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