Hace no mucho, cuando el calor madrileño entraba en modo horno, los locales programaban su GPS rumbo a la Costa Brava o la costa de Cádiz. Pero los tiempos cambian.
Hoy en día, cada vez más residentes de la capital abandonan su ciudad para una escapada rápida de cinco horas hacia el sur, a la provincia de Málaga, según Andalucía Informa. El destino: Nerja.
Por qué Madrid cambió Costa Brava y Cádiz por Nerja
Y no es difícil ver el porqué. Este rincón increíble de Andalucía, conocido como “La Joya de la Axarquía”, parece un paraíso caribeño con aguas cristalinas y arena dorada. Además, tu cartera no sufre un infarto después de tres rondas de cañas y un pescaíto frito.
Lo más leído en Euro Weekly News
Desde Madrid, llegar a Nerja es pan comido: sal de la M-30, apunta el coche hacia el sur y, antes de que te des cuenta, el Mediterráneo te está guiñando. El microclima de Nerja es imbatible: menos viento, noches más cálidas, lo que significa que puedes olvidarte de empacar ese jersey “por si acaso”.
Una vez allí, el Balcón de Europa (un mirador colgando literalmente sobre el mar) ofrece la foto perfecta que todo adicto a Instagram busca. Casas encaladas, balcones repletos de geranios y callejuelas donde el tiempo avanza a medio ritmo. En resumen, todo lo contrario del estrés acelerado de Madrid.
La fiebre del oro expatriado
Y no solo los madrileños se están enamorando.
Nerja está viviendo un auténtico boom en los últimos meses, con extranjeros (especialmente de Noruega, Suecia, Dinamarca, Irlanda y Reino Unido) no solo visitando el pueblo, sino incluso comprando viviendas y estableciéndose como residentes.
Este influjo ha dinamizado la economía local, reduciendo el desempleo a mínimos históricos.
Como todo paraíso, Nerja se está saturando rápido
Pero, como ocurre con todo paraíso, Nerja empieza a tener problemas de afluencia. Las playas están cada vez más masificadas.
Mery Navarro, una turista española en Nerja, publicó hace poco un TikTok que se volvió viral tras encontrar la Playa Burriana abarrotada. “Me quedé dos horas, no te podías mover”, se quejó, mostrando imágenes de cada centímetro de arena y mar cubierto de gente.
En definitiva, Nerja sigue siendo el sueño… pero el secreto ya se sabe. Así que ven a Nerja, vale mil por cien la pena, pero prepárate para compartir tu trocito de paraíso con todos los que han leído el mismo artículo que tú.
Lee aquí más noticias de la Axarquía.