El Ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, reconoció este viernes el “dolor e injusticia” infligidos a los pueblos indígenas durante la conquista española de América, después de que México renovara su solicitud de una disculpa oficial.
Durante la inauguración de una exposición de arte indígena mexicano en Madrid, Albares afirmó que las relaciones entre España y México constituyen “una historia muy humana y, como toda historia humana, llena de luces y sombras”.
“También ha habido dolor —dolor e injusticia hacia los pueblos indígenas, a quienes está dedicada esta exposición”, añadió.
“Hubo injusticia —es justo reconocerlo hoy y es justo lamentarlo. Porque eso también forma parte de nuestra historia compartida y no podemos negarla ni olvidarla”.
Estas declaraciones representan uno de los reconocimientos más explícitos por parte de un alto cargo español sobre el sufrimiento padecido por las comunidades indígenas de América durante la época colonial.
LECTURA RECOMENDADA: ¿Realmente España no tuvo colonias?
Anuncio
Durante años, este tema ha sido fuente de tensión diplomática entre ambos países.
En 2019, el entonces presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, envió una carta a Madrid exigiendo una disculpa de la monarquía española por los abusos cometidos durante la Conquista de México (1519-1521) y los tres siglos subsiguientes de dominio colonial.
La petición, rechazada en su momento por el gobierno español, tensionó las relaciones bilaterales.
El Rey Felipe VI no emitió una respuesta pública a la carta de López Obrador, mientras que el Ejecutivo español defendió la “historia compartida” entre ambas naciones y descartó la idea de presentar disculpas.
La Presidenta mexicana Claudia Sheinbaum, aliada política y sucesora de López Obrador, reactivó la petición esta semana, señalando que la reconciliación requiere el reconocimiento de los agravios del pasado.
Mesoamérica, región que comprendía parte de México y Centroamérica, tenía una población estimada de entre 15 y 30 millones de personas cuando el conquistador Hernán Cortés arribó con un ejército de varios cientos de hombres, portando caballos, espadas, armas de fuego —y viruela— en 1519.
Tras un siglo de batallas, masacres y epidemias, solo quedó aproximadamente entre uno y dos millones de habitantes indígenas.
LECTURA RECOMENDADA: ¿Quién fue el conquistador Hernán Cortés?