El Ministerio de Agricultura informó este martes del hallazgo de otros siete jabalíes muertos infectados con peste porcina africana en las cercanías de Barcelona, lo que eleva el total del brote a nueve casos.
El descubrimiento de dos casos en jabalíes la semana pasada en el Parque Natural de Collserola, los primeros en España desde 1994, ha generado inquietud por la potente industria exportadora de porcino del país.
Más de un centenar de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, junto a técnicos de la Generalitat y expertos de la UE, trabajan para localizar nuevos casos y contener la enfermedad, inofensiva para el ser humano pero devastadora para los cerdos.
Los análisis de laboratorio han confirmado que siete jabalíes hallados sin vida en el término municipal de Cerdanyola del Vallés estaban infectados, en un punto “muy próximo” al de los dos primeros ejemplares, según se detalló en un comunicado.
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No obstante, las explotaciones porcinas en un radio de veinte kilómetros alrededor de la zona afectada han sido examinadas “sin detectarse síntomas ni lesiones compatibles”, añadió la nota.
El Equipo Veterinario de Emergencia de la Comisión Europea se incorporó este martes a la respuesta “para evaluar las medidas desplegadas sobre el terreno y emitir recomendaciones” con el objetivo de controlar la enfermedad “a la mayor brevedad posible”.
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Cualquier propagación de la enfermedad a las granjas podría afectar gravemente al tercer productor mundial de carne de cerdo y sus derivados.
España exporta cerca de tres millones de toneladas anuales a más de un centenar de países, aunque el ministro Luis Planas ha señalado que un tercio de ellos ha suspendido las importaciones como medida de precaución.
Planas celebró el lunes la decisión de China —el principal mercado para el porcino español— de mantener las importaciones de zonas ajenas a la región de Barcelona.
La peste porcina africana también está presente en los países bálticos y en Europa del Este, adonde llegó desde Rusia en el año 2014.