El Gobierno español anuncia que está listo para presentar una nueva “ley abolicionista” en septiembre.
Crédito: Oleg Elkov/Shutterstock
La prostitución en España siempre ha habitado una zona gris legal: ni plenamente legal, ni completamente ilegal.
Durante décadas, se caracterizó por clubes iluminados con neón en carreteras y apartamentos turbios en las periferias urbanas. Pero en los últimos 20 años, especialmente tras la pandemia de COVID, el panorama completo se ha trasladado a la red.
