Emma Raducanu celebra un punto contra Maya Joint en su partido del día tres del Eastbourne Open en el Devonshire Park Lawn Tennis Club, Eastbourne, Inglaterra, el miércoles 25 de junio de 2025. (Adam Davy/PA via AP)
LONDRES – Emma Raducanu recuperó el puesto número uno de Gran Bretaña este mes, pero todavía le falta para recuperar ese nivel que la hizo famosa en 2021.
Aún así, a pesar de sus bajas expectativas, la tenista de 22 años sigue siendo una de las deportistas más reconocidas del país y llega a Wimbledon como la gran esperanza británica para el título femenino, que hace mucho no gana una local.
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Pocas tenistas en la historia han tenido un ascenso tan rápido e inesperado como el de Raducanu en 2021, cuando ganó el US Open y se convirtió en la primera clasificada en ganar un Grand Slam en la Era Abierta (desde 1968).
Eso puso el listón muy alto para la jugadora nacida en Toronto, y ella misma admite que su camino desde entonces no ha sido nada fácil.
Después de entrar al top 10 mundial gracias a su éxito en Flushing Meadows, Raducanu ha luchado con lesiones en la muñeca y el pie, mala forma y cambios constantes de entrenadores buscando la fórmula mágica.
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Ese increíble US Open sigue siendo su único título, pero hay señales de que va mejorando.
Llegar a cuartos en Miami, octavos en Roma y cuartos en Queen’s Club la han ayudado a subir al puesto 38 del ranking, aunque todavía le cuesta contra las mejores del circuito.
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Mark Petchey, extenista británico que entrenó a Andy Murray, es su nuevo entrenador desde abril. Él dijo: "Todos siguen viviendo en 2021, pero el tenis ha cambiado mucho. Las pelotas son más pesadas y Emma no es de las que golpean más fuerte".
También ha sufrido acoso y una lesión en la espalda que la obligó a retirarse en Berlín antes de Wimbledon.
Además, habrá preguntas sobre su amistad con Carlos Alcaraz, ya que jugarán juntos en dobles mixtos del US Open, lo que ha generado rumores.
Aun así, Raducanu tiene el talento para competir con las mejores y quiere superar sus dos anteriores cuartos de final en Wimbledon.
Los fanáticos esperan que, al entrar en Wimbledon, vuelva a jugar con esa libertad que tenía cuando era adolescente.