El expresidente brasileño encarcelado, Jair Bolsonaro, se ha sometido a un tercer procedimiento médico en cuatro días para tratar unos hipo persistente.
Los médicos realizaron una tercera operación para bloquear su nervio frénico. Este nervio se encuentra en el cuello y es vital para controlar el diafragma, que controla la respiración.
La esposa del expresidente, Michelle Bolsonaro, compartió un comunicado en las redes sociales confirmando que su marido se sometió a un tercer procedimiento porque el hipo “no se había detenido” desde el fin de semana.
El líder de ultraderecha cumple una condena de 27 años por planear un golpe de estado para anular las elecciones del 2022.
El equipo médico de Bolsonaro dijo que se sometería a más pruebas el miércoles para determinar si tiene reflujo gastroesofágico. Esto ocurre cuando el ácido del estómago regresa hacia la garganta y provoca acidez.
Las dos operaciones previas para el hipo, el sábado y el lunes, trataron los nervios frénicos derecho y izquierdo de Bolsonaro.
Los doctores dijeron el martes que no “creen que la hospitalización se prolongue mucho más”.
Su esposa, Michelle, declaró que las cirugías del expresidente siguen a “nueve meses de lucha y angustia con hipo diario”.
Bolsonaro, de 70 años, fue ingresado originalmente en un hospital de la capital, Brasilia, para someterse con éxito a una cirugía de doble hernia el día de Navidad. Debía salir del hospital el 1 de enero si su recuperación iba bien.
El Supremo Tribunal Federal de Brasil permitió que el expresidente encarcelado fuera trasladado desde la sede de la policía, donde cumple condena, hacia el hospital.
Antes de su cirugía de hernia, el expresidente se sometió a una operación intestinal en abril.
Bolsonaro fue presidente de Brasil entre 2019 y 2023. Perdió las elecciones del 2022 frente al actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.
Un hombre apuñaló a Bolsonaro en el abdomen durante un mitin electoral un mes antes de los comicios de 2018, lo que requirió cirugía debido a una gran pérdida de sangre. La puñalada ha provocado problemas de salud continuos para la figura de ultraderecha.
Él ha apoyado a su hijo, Flávio Bolsonaro, para que se presente contra Lula en las elecciones presidenciales del 2026.