DE LOS 100 miembros de junta mejor pagados de las empresas españolas, solo siete son mujeres según un nuevo informe de compensación de EL PAÍS.
Esto incluye a Ana Botín en la junta de Santander y a María Echenique de Logista. Botín también tiene un fondo de jubilación valorado en 54,73 millones de euros.
España se ha enorgullecido en el escenario mundial como líder europeo en su intento de abordar la igualdad de género y la discriminación salarial. Es la tercera economía más grande del mundo más cerca de disolver la brecha de género.
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“En un momento en el que los derechos de las mujeres están retrocediendo en muchos países, mi gobierno está comprometido con el feminismo como columna vertebral de su acción política, y está llevando a cabo una intensa actividad legislativa y ejecutiva”, dijo el presidente Pedro Sánchez.
En los últimos años, se promulgaron leyes que establecen que las empresas con más de 50 empleados deben tener un Plan de Igualdad que describa las acciones tomadas para abordar la igualdad de género entre su personal.
Todas las empresas deben mantener registros de remuneración transparentes para todos los empleados, y cualquier brecha salarial de género que sea del 25% o más debe ser explicada.
Y aunque las mujeres ocupan ahora el 40% de los puestos directivos, según un informe de Grant Thornton de 2024, un aumento significativo desde solo el 14% hace dos décadas, la brecha salarial de género entre las ejecutivas sigue siendo un contraste marcado con este progreso en el liderazgo.
Grant Thornton predice que también se necesitarán al menos otros 20 años antes de que esa cifra alcance el 50% de mujeres ocupando puestos directivos.
Desigualdad salarial entre jefe y empleado
El CEO de la empresa española de sistemas de seguridad Prosegur ganó 5,05 millones de euros en 2024, un ingreso 361 veces mayor que lo que un empleado promedio de la empresa gana allí, 14.000 euros al año. Es la empresa española con la mayor brecha salarial, según EL PAÍS.
Los directores del Ibex 35 ganan un salario 79 veces más alto que sus empleados promedio, una cifra que apenas ha cambiado en los últimos cinco años. Esto significa que, incluso en dos vidas con 72 años de trabajo, sus empleados aún no ganarían el equivalente a lo que sus jefes ganan por solo un año de trabajo.
El club de salarios millonarios de la junta directiva también ha aumentado en número, con 84 directores de junta que ganaron salarios de más de un millón de euros el año pasado.
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