El Puerto Seguro de la Telesalud Beneficia a Trabajadores y Empleadores por Igual

La Ley “One Big Beautiful”, promulgada el 4 de julio, incluye algunos de los cambios más significativos en la política sanitaria de EE.UU. desde la Ley de Cuidado de Salud Asequible. Aunque muchos actores del sector —desde médicos y empleadores hasta pacientes y legisladores— están comprensiblemente preocupados por el impacto proyectado en la cobertura de seguros y el acceso a la atención, la ley contiene un aspecto positivo y en gran medida pasado por alto: la cobertura de telesalud sin deducible para quienes tienen planes de salud con deducibles altos (HDHP).

La ley reinstaura y extiende de forma permanente una política temporal creada durante la emergencia sanitaria por Covid-19, que permitía a los empleadores ofrecer servicios de telesalud sin costo o a bajo costo a los afiliados de HDHP antes de cumplir con su deducible, sin afectar su elegibilidad para usar cuentas de ahorros para salud (HSA). A primera vista, esta disposición —técnicamente una enmienda al código tributario federal— podría parecer un detalle menor comparado con otros cambios más ambiciosos de la ley, pero representa un gran avanze para consumidores y empleadores por igual.

Esta política, que cuenta con amplio apoyo bipartidista, reafirma lo que muchos ya reconocen: la atención virtual es un componente esencial de la atención médica. La telesalud ya no es solo un parche de la pandemia o una opción ocasional para consultas aisladas. Ya sean proveedores tradicionales que ofrecen una alternativa a las visitas presenciales o compañías de tecnología médica que integran lo digital y lo físico, la atención virtual está consolidada en el sistema de salud.

Casi la mitad de los estadounidenses ha tenido una consulta virtual, y la gran mayoría ha adoptado esta modalidad para necesidades diversas, desde urgencias cotidianas hasta terapia psicológica o manejo de enfermedades crónicas. Ante la escasez de médicos y barreras de acceso —geográficas, sociales o económicas—, la atención virtual se ha convertido en un salvavidas para millones.

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El vencimiento de esta política en diciembre de 2024 ponía ese salvavidas en riesgo. Para los afiliados a HDHP elegibles para HSA —que cubren a más del 20% de la población activa con seguro privado—, su expiración hubiese limitado el acceso a la telesalud al aumentar los gastos de bolsillo (y afectar la elegibilidad para HSA). Más allá, también frenaba la innovación de empleadores y aseguradoras que ha impulsado la revolución de la atención virtual.

Los empleadores, especialmente los grandes que autofinancian sus planes, han sido clave para hacer la telesalud más accesible. Casi dos tercios ampliaron estos servicios durante la pandemia, y más del 80% de los planes para empleadores redujeron o eliminaron copagos en HDHP.

Algunos reintrodujeron copagos ya en 2021, lo que en ciertos casos redujo el uso, según un estudio en JAMA. Sin embargo, el 76% de los empleadores, según una encuesta, apoyaba hacer permanente esta política.

Este respaldo refleja la creciente relevancia de la telesalud para ofrecer atención de calidad que a veces no está disponible en entornos tradicionales.

Estudios muestran que quienes tienen HDHP son más sensibles a los costos y tienden a posponer cuidados preventivos, aumentando el riesgo de hospitalización. La política no solo redujo gastos directos, sino que también ofreció una opción conveniente que minimiza costos indirectos, como transporte o pérdida de salario por ausentarse.

La cobertura sin deducible ha demostrado ser una herramienta clave para decisiones de salud beneficiosas tanto para empleados como empleadores. Aunque no obliga a eliminar copagos, da flexibilidad a las empresas para integrar la telesalud a largo plazo en su estrategia de bienestar.

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Es pronto para predecir el impacto total de la ley, pero en medio de la incertidumbre, esta disposición ofrece un espacio seguro para seguir avanzando hacia un sistema más adaptable.

Crédito foto: Sorbetto, Getty Images

Ami Parekh es Directora de Salud en Included Health. Anteriormente, fue Directora Médica de Salud Poblacional en UCSF Health.

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