El miedo de un aumento grande en los impuestos a las apuestas de carreras de caballos se ha calmado. Esto pasó con el presupuesto anunciado por la ministra Rachel Reeves. Pero, los impuestos para otros tipos de juego van a subir.
El impuesto para las apuestas de carreras de caballos, en las casas de apuestas y en internet, va a quedar igual al 15 por ciento. Esta noticia viene después de una campaña en contra de la idea de cambiar los impuestos del juego.
La industria de las carreras estaba muy preocupada por el impacto de subir los impuestos. Por eso, hubo un día sin precedentes de huelga el 10 de septiembre.
Las reuniones programadas en Carlisle, Lingfield, Kempton y Uttoxeter fueron canceladas. Muchas figuras importantes del deporte se juntaron en Westminster para el evento ‘Axe The Racing Tax’ organizado por la British Horseracing Authority.
Un análisis económico dijo que un aumento del 15 por ciento al 21 por ciento podría costar al deporte por lo menos £66 millones y poner en riesgo 2,752 trabajos en el primer año. El presidente de la BHA, Lord Allen, dijo que esto era “una amenaza existencial para nuestro deporte”.
Esa amenaza ya no existe con la confirmación de que el impuesto no cambiará. Sin embargo, el gobierno espera recaudar más de £1 mil millones para el 2031 con cambios en otros impuestos al juego.
El impuesto general de apuestas, que se paga por otros tipos de apuestas deportivas, va a quedar en 15 por ciento en las tiendas, pero subirá a 25 por ciento en línea. El impuesto al juego en línea, que se paga por las apuestas en casinos en internet, subirá del 21 al 40 por ciento.
El impuesto a las apuestas en máquinas, como las que hay en las tiendas, no ha sido cambiado.
Las casas de apuestas avisaron antes del presupuesto que cualquier cambio que afecte sus ganancias podría tener un efecto malo para las carreras. Podría haber cuotas de apuesta menos generosas y el cierre de tiendas. Las carreras reciben dinero a través de pagos por derechos de medios y de un impuesto de cada tienda.