Antes de la reapertura del Paseo Marítimo de Cabo Roig, el ayuntamiento debe obtener autorización judicial para evitar los errores del pasado y prevenir futuras litigios.
El Partido Popular (PP) de Orihuela ha acusado al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de ser el responsable del cierre prolongado del paseo litoral de Cabo Roig–La Caleta, insistiendo en que, conforme a la Ley de Expropiación Forzosa, se requiere autorización judicial para tomar posesión de terrenos expropiados cuando los antiguos propietarios se oponen al proceso.
El grupo popular tildó de “grave irresponsabilidad” que el PSOE cuestione un procedimiento que, aseguran, “está claramente regulado”, subrayando que la actual coalición de gobierno PP-Vox ha seguido escrupulosamente todos los trámites legales en la gestión del expediente expropiatorio necesario para reabrir la senda costera.
El tramo en disputa, de 60 metros y ubicado en la urbanización Bellavista, permanece clausurado, lo que obliga a los peatones a un rodeo de casi dos kilómetros para conectar ambos extremos del paseo.
Esta sección lleva clausurada desde diciembre de 2021, cuando una sentencia judicial reconoció la zona como propiedad privada. El conflicto se remonta a 2013, cuando la comunidad de propietarios construyó un muro para bloquear el acceso.
Entre 2015 y 2021, el paseo fue reabierto por orden municipal bajo el entonces concejal de Urbanismo, Antonio Zapata (PSOE), quien argumentó que los muros se habían construido sin licencia y constituían una infracción urbanística no legalizable. No obstante, los tribunales dieron la razón a los propietarios, fallando que la propia orden municipal vulneró el procedimiento legal y los derechos de propiedad, lo que condujo al nuevo cierre del paso.
“Temerario e Ilegal”
Según el PP, esta “grave situación” proviene de la “desastrosa gestión” de Zapata, de quien afirman que actuó “manu militari, sin respaldo legal alguno, provocando el cierre por sentencia judicial de un tramo de paseo que fue abierto ilegalmente”. Califican sus acciones como una “decision política temeraria” que ha perjudicado a residentes y visitantes, y argumentan que el PSOE nunca ha asumido su responsabilidad.
El actual gobierno, enfatiza el PP, no ha hecho más que acatar la ley escrupulosamente. Señalan que la Ley de Expropiación Forzosa (16 de diciembre de 1954) establece las condiciones bajo las cuales se puede expropiar terreno por interés público. Cuando dicho acceso involucra zonas comunes dentro de una urbanización privada, la ley exige autorización judicial si surge oposición.
De acuerdo con el PP, este requisito es aplicable en el presente caso porque:
El acceso es esencial para culminar el proyecto de interés público.
Los propietarios se han opuesto o podrían oponerse.
La ley debe salvaguardar los derechos de propiedad mientras pondera el interés general.
Por esta razón, arguyen, el Ayuntamiento ha actuado con cautela y precisión jurídica para asegurar que ningún error procesal pueda invalidar la acción posteriormente.
“Jurídicamente Imposible”
El PP criticó además al PSOE por celebrar una rueda de prensa el pasado jueves para lanzar sus acusaciones “sin haber estudiado el expediente ni la jurisprudencia pertinente”. Desestimaron las afirmaciones de que el gobierno ya debería haber solicitado la intervención judicial, calificándolo de “jurídicamente imposible” ya que dicha solicitud solo puede realizarse una vez finalizado el proceso expropiatorio, fijado y depositado el justiprecio, y si los propietarios aún deniegan el acceso.
“Este asunto no es de valentía o cobardía—es de responsabilidad. Ser responsable significa seguir la ley, aunque no genere titulares inmediatos. Ésa es la diferencia entre el gobierno actual y el PSOE, que en el pasado demostró su disposición a actuar al margen de la legalidad”, concluyó el PP.
Sin embargo, para residentes y visitantes, las disputas legales y políticas se traducen en un inconveniente diario. La clausura del tramo rompe la continuidad de una de las rutas litorales más populares de la Orihuela Costa, menoscabando tanto la movilidad peatonal como el atractivo turístico de la zona.
Asociaciones locales, como Unidos por la Costa, han exigido repetidamente una solución rápida, insistiendo en que el paseo debe tratarse como un bien público que beneficia a toda la comunidad.
Ya sea mediante expropiación o acuerdo legal, la reapertura del tramo de Aguamarina sigue siendo una prioridad para la planificación costera de Orihuela. No obstante, con los trámites aún pendientes, el calendario para restablecer el acceso completo es incierto, manteniendo a la comunidad a la espera del día en que se pueda disfrutar del paseo marítimo sin interrupciones.
El Paseo de Cabo Roig–La Caleta Permanece Cerrado Disputa Legal en Orihuela
Un tramo de 60 metros del paseo de Cabo Roig–La Caleta en Orihuela lleva casi cuatro años cerrado, forzando a residentes y visitantes a un desvío de casi dos kilómetros para continuar por la senda costera.
Lo que podría parecer un simple problema de acceso es, en realidad, el resultado de una compleja batalla legal sobre derechos de propiedad, decisiones urbanísticas y los límites de la autoridad municipal.
