El Papa León XIV se está preparando para viajar a Líbano este año, en lo que podría ser su primer viaje al extranjero desde que fue elegido cabeza de la Iglesia Católica en mayo.
El arzobispo Paul Sayah, ayudante del líder católico de más alto rango en Líbano, dijo a la BBC que el Vaticano estaba “estudiando” el viaje, pero que la iglesia todavía esperaba por las fechas oficiales.
La visita marcaría un momento significativo para el primer Papa americano, quien ha pedido repetidamente paz en el Medio Oriente y la convivencia entre religiones.
“El Líbano es un país multicultural y multireligioso, y es un lugar de diálogo,” dijo el Obispo Sayah.
“Es uno de los pocos lugares donde musulmanes y cristianos viven juntos y se respetan mutuamente… así que manda un mensaje a la región.”
Ha habido mucha especulación sobre el primer destino internacional de Leo, ya que los primeros viajes papales a menudo definen el tono de un pontificado.
El primer viaje importante del difunto Papa Francisco fuera de Roma, a la isla italiana de Lampedusa en 2013, estableció las bases para su enfoque en la migración y las comunidades marginadas.
En décadas recientes, los viajes al extranjero se han vuelto centrales para el papado, permitiendo a los papas conectar con católicos en todo el mundo, esparcir su mensaje y participar en diplomacia.
Durante sus 12 años como pontífice, Francisco visitó 68 países en 47 viajes al extranjero, a menudo eligiendo destinos en los márgenes del mundo, que él describió como las “periferias” de la Iglesia.
El Líbano, hogar de más de dos millones de católicos y conocido por su diversidad religiosa, siempre ha tenido un peso simbólico para la Iglesia. Una parada papal allí también pondría a Leo cerca de la guerra en Gaza y el conflicto más amplio entre Israel y Palestina.
“Todos hablan con Israel, pero Israel no escucha. Netanyahu no parece escuchar mucho, pero cuanto más [hablen los líderes], mejor,” dijo el Obispo Sayah.
“Si el Papa añade su voz y preocupación, creo que es probable que tenga algún impacto.”
El Papa León ya ha llamado la atención por sus esfuerzos de acercamiento con otras fes.
Una de sus primeras reuniones después de su elección fue con una delegación interreligiosa, donde alabó las “raíces judías del Cristianismo” y honró el “compromiso creciente con el diálogo y la fraternidad” entre católicos y musulmanes. Ha insistido repetidamente en que cristianos, judíos y musulmanes deben “decir no a la guerra y sí a la paz”.
Si el viaje procede, seguiría a las visitas de Juan Pablo II y Benedicto XVI, ambos recordados por sus mensajes de paz y convivencia religiosa.
A principios de este mes, el Papa León también conmemoró el quinto aniversario de la explosión en el puerto de Beirut, que mató a 200 personas y causó daños por miles de millones.
“El amado y sufrido Líbano permanece en el centro de nuestras oraciones,” dijo él.