En 1997, un ortodoncista de Chennai sostuvo su primera cámara réflex de dos objetivos en un mercadillo de la ciudad, y ese hallazgo despertó una pasión para toda la vida. Todas estas décadas después, se ha convertido en una colección de aproximadamente 5,800 cámaras de fotografía, lo que le valió un Récord Guinness por la colección más grande de cámaras y el conjunto más distintivo de cámaras de película. Cada pieza, desde raros modelos Polaroid y cámaras plegables hasta miniaturas de bolsillo, encuentra su lugar en su museo de cámaras en Kovalam. Detrás de esta vasta colección, A.V. Arun equilibra su hobby mientras ejerce la odontología a tiempo completo desde los años 90.
“Siempre he mantenido mi profesión y mi pasión separadas,” dice el Dr. Arun. “Pracisar odontología es simplemente esencial. Me ayuda a mantener mi vida y sostenerla. Sin embargo, lo que hace que valga la pena vivirla es siempre mi pasión.” El instinto coleccionista del Dr. Arun era parte de él incluso antes de dedicarse a la odontología. Comenzó con tapas de botellas cuando estaba en la escuela, luego miniaturas de frascos de perfume, y en algún momento del camino, evolucionó en un museo de cámaras.
Dr. Arun con una cámara
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Arreglo Especial
Cámaras de todo el mundo
Siempre que sus conferencias de odontología lo llevan a otras partes del mundo, el ortodoncista termina en los mercadillos locales después del trabajo. “Una vez, en Australia, conseguí como 40 cámaras por un precio regalado,” dice. “Así que, encontrarás piezas en el museo de todos los rincones del mundo.”
La precisión y paciencia que la odontología demanda parece transladarse sin problemas a su mundo de las cámaras también. Cuando le preguntan cómo se las arregla para compaginar ambas, dice que la respuesta es simple: “Nadie está nunca demasiado ocupado.” “Después del horario de consulta, llego a casa a leer sobre cámaras, limpiarlas, jugar con ellas—a veces incluso hasta la 1 de la madrugada.”
Para alguien rodeado de miles de cámaras, curiosamente, el Dr. Arun no toma demasiadas fotos él mismo. “No mucha gente revela carretes hoy en día,” dice. “Es demasiado caro. Pero soy más un coleccionista que un fotógrafo.”
Ojo de coleccionista
Cuando el Dr. Arun comenzó a coleccionar cámaras de película, no había mucha competencia, pero eso cambió con el tiempo. “Una vez, alguien de Chandigarh me llamó para decirme que tenía una cámara británica completamente de madera,” recuerda. “Como estaba hecha así, el servicio de mensajería no era ideal, y tomé un tren hasta allí para traerla yo mismo.” Bueno, esa cámara, que data de la década de 1870, es una de las más antiguas en su colección.
“Hoy en día, coleccionar cámaras está haciendo un regreso lentamente entre la gente joven también. Y es bastante cierto—lo que es inútil para una persona podría ser un tesoro para otra. Solo un verdadero coleccionista puede ver eso.”
El museo de cámaras en Kovalam abre solo los domingos, y solo con cita previa, para recibir a otros aficionados a las cámaras. Además, también visita universidades para dar charlas sobre la historia y la mecánica de las cámaras, porque algunas pasiones, resulta, merecen su propio tiempo de exposición.
Publicado – 25 de octubre de 2025 06:00 am IST