Según el portal inmobiliario Idealista, en agosto se listó una vivienda en Artá de noventa metros cuadrados por un precio de 283.680 euros. Esta cifra superaba en más de cien mil euros el precio medio de Baleares —396.573 euros—, aunque se mantenía muy por encima de la media nacional, situada en 226.226 euros. Estos datos fueron proporcionados por el Colegio de Registradores en su informe correspondiente al segundo trimestre de 2025.
El precio de la vivienda en Artá se ajustaba al coste medio por metro cuadrado en el municipio. Aunque esta media resulta más asequible que en otras zonas de Mallorca, especialmente en determinadas áreas costeras, se ha registrado un incremento interanual superior al trece por ciento. La relativa asequibilidad ha generado un mayor interés, lo cual, a su vez, ha presionado al alza los precios.
Artá se encuentra a aproximadamente una hora en coche de Palma. Las conexiones de transporte han sido un problema durante años, de ahí los repetidos intentos de reactivar el ferrocarril hasta Manacor, que conectaría por tren con Palma. Sin embargo, el Govern balear no considera prioritario este trazado; sus prioridades actuales son las líneas de Palma a Llucmajor/Campos y de Sa Pobla a Alcúdia.
A pesar de ello, Artá es un lugar atractivo para residir. Gran parte de su término municipal se halla dentro del Parque Natural de Llevant y, para tratarse de un municipio costero, el turismo es relativamente escaso. El desarrollo litoral ha sido limitado, algo que puede explicarse, al menos en parte, por su geografía. La Colonia de Sant Pere, de reducidas dimensiones y muy distinta a otros centros turísticos de la bahía de Alcúdia, constituye el único núcleo costero relevante.
Relativamente asequible por ahora, pero ¿por cuanto tiempo más?