Esta semana nos sentamos con Paul Airey, quien ha hecho su hogar en la Costa Cálida. Al igual que muchos expatriados, su trayectoria hacia España estuvo marcada por la familia, el momento oportuno y un anhelo por un modo de vida distinto.
Dar el paso
Paul llegó por primera vez a España el 1 de enero de 2003, dejando atrás Maldon, en Essex, donde él y su esposa vivían en aquel entonces. Originario de Burnley y del sur de Gales, explicó que la decisión de mudarse se redujo a un tema familiar.
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«Me di cuenta de que trabajaba únicamente para poder irme de vacaciones», comentó. «Al ser mis hijos tan pequeños, era una oportunidad de ahora o nunca. No queríamos arrepentirnos de no hacerlo, ni disruptir la educación de nuestros hijos haciéndolo “dentro de unos años”.»
Para Paul, no se trataba solo de escapar de la rutina laboral; sino de brindar a su familia una vida más rica en experiencias y oportunidades, todo ello mientras disfrutaban de una nueva cultura y estilo de vida.
Forjando una carrera en España
Su carrera profesional en España ha dado varios giros. Comenzando en el sector inmobiliario, Paul llegó a abrir su propia agencia, luego dirigió una tienda de muebles hasta que se jubiló en 2022. Más recientemente, cofundó el pódcast Spainfully Honest, diseñado para ayudar a las personas a adaptarse a la vida española.
«En junio de 2025 ayudé a iniciar un pódcast con un amigo y colega llamado ‘Spainfully Honest‘, que está diseñado para ayudar tanto a nuevos residentes como a quienes ya viven en España a adaptarse al estilo de vida español», explicó.
El pódcast abarca consejos prácticos, desde cómo navegar la burocracia hasta tips para aprender español e integrarse en la comunidad. Para Paul, se trata de compartir experiencias reales, no solo teoría.
«No es solo cuestión de lo técnico», afirma. «Hablamos de las pequeñas cosas que marcan una gran diferencia, como comprender las costumbres locales, qué esperar de tiendas y servicios, y cómo sentirse realmente como en casa aquí».
Paul considera que los pódcasts son un medio perfecto para los expatriados, ya que ofrecen orientación y consuelo. «Vivir en un nuevo país puede ser abrumador, especialmente al principio cuando no se conoce a nadie. Nuestra meta es que la gente se sienta apoyada, conectada y con la confianza para disfrutar de España plenamente».
A través de Spainfully Honest, Paul continúa combinando su experiencia como expatriado, emprendedor y padre, ofreciendo perspectivas que solo alguien que ha vivido el espectro completo de la vida española puede aportar.
Lo que más echa de menos
A pesar de haber construido una nueva vida aquí, Paul admite que persiste un gran desafío: la distancia de sus hijos.
«Se educaron en España hasta los A-levels, pero eligieron ir a la universidad en el Reino Unido. Ahora viven en Londres e Irlanda, y los echo muchísimo de menos», dijo.
La vida en la Costa Cálida
Al preguntarle qué es lo que más disfruta de España, el entusiasmo de Paul es evidente.
«Me encanta estar aquí, lo considero mi hogar. Me encanta el modo de vida, el clima, la comida y la bebida, la mezcla de nacionalidades… Simplemente, me encanta», afirmó.
Pero hay un momento en particular que todavía le quita el aliento:
«Todavía se me eriza la piel cuando salgo del garaje hacia el paseo marítimo y veo la vista matutina de un Mar Menor en calma chicha, con las colinas detrás del La Manga Club en la distancia; es impresionante».
Lidiando con la burocracia en España
Vivir en el extranjero conlleva desafíos, particularmente la burocracia. Paul recomienda buscar ayuda profesional.
«A menos que seas 100% fluido en español técnico, estás en desventaja. Tener un abogado o gestor español ayuda muchísimo, y vale la pena por lo que pagas por ello», señaló.
Aprendiendo el idioma
Aprender español ha sido difícil para Paul debido a un problema de memoria, pero insiste en que es esencial para cualquiera que se mude a España.
«Es probablemente lo más importante que hay que hacer al llegar. Si te apegas solo a lo que conoces de tu país de origen, te pierdes gran parte de lo que es maravilloso de España», explicó.
Amistades y comunidad
Para muchos expatriados, construir un círculo social en un nuevo país puede ser un reto, pero Paul ha encontrado su propio equilibrio. Aunque sus amigos son principalmente españoles e ingleses, disfruta de la mezcla de culturas que ofrece la vida en la Costa Cálida.
«No, la verdad es que no, principalmente españoles e ingleses, pero a medida que crecen otras nacionalidades, estoy seguro de que el espectro se ampliará», comenta.
Paul cree que la clave para las conexiones significativas es compartir el mismo entusiasmo por la vida en España. «Me encanta estar con gente a la que le gusta estar aquí, y no aguanto demasiado a quienes no. ¿Qué sentido tiene?»
También valora las pequeñas interacciones cotidianas que enriquecen la vida: charlar con los vecinos, disfrutar de unas tapas con amigos o asistir a eventos locales. Según Paul, estos momentos son tan importantes como las amistades formales; te ayudan a sentirte parte de la comunidad y verdaderamente inmerso en la vida española.
Incluso con una creciente población de expatriados, subraya que estar abierto a la cultura española es vital. El esfuerzo por comprender las costumbres locales y comunicarse en español, aunque sea de forma imperfecta, abre puertas a amistades que trascienden la nacionalidad.
«Si te apegas solo a lo que conoces de tu país de origen, te pierdes gran parte de lo que es maravilloso de España», reflexiona, destacando cómo la vida social en España es inseparable de su cultura y estilo de vida.
Después de más de dos décadas, Paul no tiene duda de que mudarse fue la decisión correcta. España no es solo el lugar donde vive, es su hogar.
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