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El ministro de comunicaciones de la República Democrática del Congo declaró que “no se puede mirar a África con ojos americanos” durante una entrevista en la Cumbre ‘Next 3 Billion’ de Semafor. Esto lo dijo cuando le preguntaron sobre cómo las percepciones del conflicto en el este del país, rico en minerales, están afectando a la inversión.
“Por eso los países occidentales están perdiendo terreno. China está ganando más espacio. No es porque no queramos trabajar en la democracia y todas esas cosas, pero esas no pueden ser la primera condición”, dijo Patrick Muyaya.
Sus comentarios llegaron mientras Estados Unidos intenta mediar para lograr la paz entre la RD Congo y su vecino Ruanda. Los dos países africanos firmaron un acuerdo en junio, pero no ha logrado detener los combates en el este del Congo, donde los rebeldes del M23, apoyados por Ruanda, luchan contra las fuerzas de Kinshasa.
En la cumbre de Semafor, Muyaya culpó a Ruanda por no cumplir su parte del trato y por negar sus vínculos con el M23, pidiendo a la administración estadounidense que ejerza más presión sobre Kigali.
“Estamos muy cerca de la paz, y al mismo tiempo estamos muy cerca de la guerra”, afirmó, destacando la participación de EE.UU. como algo positivo. “Una cosa es lo que ellos [Ruanda] pueden decir diplomaticamente, pero la situación sobre el terreno requiere, creo, más presión de la administración americana.”
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Muyaya también habló del proyecto del Corredor de Lobito, valorado en miles de millones y apoyado por EE.UU. —que incluye la construcción y modernización de vías férreas desde el puerto de Lobito en Angola hasta centros mineros claves en Zambia y la RD Congo. Calificó el proyecto, que dará a EE.UU. acceso a minerales estratégicos, como un “cambio de juego”. La UE también anunció en junio una inversión de casi 1.000 millones de dólares en el proyecto.
La República Democrática del Congo es el mayor productor mundial de minerales como el cobalto y el coltán, componentes clave de una amplia gama de productos como las baterías de coches eléctricos, teléfonos móviles y ordenadores portátiles.