El diseñador de moda italiano y dueño de la marca billonaria, Giorgio Armani, ha fallecido a los 91 años.
Fue el arquetipo del estilo y la elegancia italiana, reinventando los trajes para hombres y mujeres para un público moderno.
Armani, que comenzó como una compañía de moda, se expandió hacia la belleza, la música, el deporte e incluso hoteles de lujo.
También fue un empresario muy respetado, con su compañía generando más de 2 mil millones de libras al año.
En un comunicado en la página de Instagram de la marca, se dijo que Armani “trabajó hasta sus últimos días, dedicándose a la empresa, las colecciones y los muchos proyectos futuros en marcha”.
También dijo que fue “incansable hasta el final” y “guiado por una curiosidad implacable y una profunda atención al presente y a las personas”.
El diseñador fue visto como un pionero en muchos aspectos, elevando la moda de la alfombra roja a lo que vemos hoy.
También fue el primer diseñador en prohibir las modelos con bajo peso en la pasarela, después de la muerte de la modelo Ana Carolina Reston en 2006 por anorexia nerviosa.
En un perfil del Financial Times, en una de las últimas entrevistas del diseñador, Alexander Fury escribió: “Vistió a las mujeres con un uniforme de trajes tan radical como el de Chanel, creando ropa fuerte y segura que ayudó a impulsar la revolución social de la mujer trabajadora de los años 80.
En contraste, relajó la moda masculina, deconstruyendo la sastrería tradicional de una manera que ha afectado a como se hace casi cada traje en el mundo.”