A veces, aparece un equipo que cambia todo. No solo desafía a los grandes… ¡se convierte en uno de ellos! Bienvenidos al ‘Club de los Gigantes’ de la Superliga, Hull KR.
Pocos deportes pueden decir que cuatro equipos han dominado tanto como en la Superliga. Y uno de esos cuatro, los Bradford Bulls, no está en la primera división desde hace 11 años.
Veintisiete finales grandes habían pasado, y solo esos cuatro nombres ganaban el trofeo. Leeds tuvo su época de éxito, igual que St Helens. No había un nombre nuevo en el trofeo desde hacía 21 años.
La lista era: Wigan Warriors, St Helens, St Helens, Bradford Bulls, St Helens, Bradford, Leeds Rhinos, Bradford, St Helens, Leeds, Leeds, Leeds, Wigan, Leeds, Leeds, Wigan, St Helens, Leeds, Wigan, Leeds, Wigan, St Helens, St Helens, St Helens, St Helens, Wigan, Wigan.
Pero en la 28ª Gran Final de la Superliga, algo pasó. Hubo un cambio, y la competición ya nunca será igual.
Hull KR se convirtió en el quinto nombre de esa lista.
Arruinaron el intento de Wigan de ganar tres finales seguidas, y Hull KR hicieron su propia historia al ganar el triplete.
Ellos habían ganado el League Leaders’ Shield y la Challenge Cup. Terminaron primeros. Pero aún así, Wigan eran los favoritos para la final.
La experiencia importa, decía todo el mundo. Pues Hull KR rompió ese guión y mucho más, con una victoria de 24-6 que cambió la historia de su club.
Wigan era el campeón pesado y Hull KR fue el desafiente a su título.