El aeropuerto de Palma lleva varios meses en plena remodelación y ya se vislumbra el final de las obras. Uno de los cambios más notables es la renovación del Módulo A, que ahora cuenta con una zona comercial modernizada y áreas más amplias y diáfanas. Esta es solo una de las novedades; otro avance importante es la remodelación de la cuarta planta, que antes albergaba los controles de seguridad y una terraza.
Entre los nuevos locales que ya reciben visitantes está el McDonald’s más grande de Europa, situado en el nivel P30 del módulo renovado. Inaugurado en mayo, ocupa 1.000 metros cuadrados y destaca por sus 40 kioskos digitales para pedidos y ocho líneas de preparación distintas. Además, ofrece servicio en mesa y opciones de McCafé, con casi 200 empleados.
Junto a McDonald’s, otras 18 empresas han abierto sus puertas en el aeropuerto. La oferta incluye locales de restauración como Enrique Tomás, Deli&Cia, Costa Coffee y Santo Cristo. También hay una zona Duty Free y tiendas de moda, regalos y joyería con marcas como Majórica, Natura, Mango, Desigual, Stamp, Coolligan, Miniso y una Barça Store, entre otras. Esta variedad consolida al aeropuerto como uno de los mayores espacios comerciales de la isla.
En las últimas semanas, casi todos los locales de esta nueva área han empezado a funcionar, marcando un hito clave en la remodelación.
Con las obras ya en su fase final, tras meses de molestias para los pasajeros, Aena prevé su culminación el próximo año. Este proyecto supone la mayor actualización de la terminal en 25 años.
Entre las mejoras ya implementadas está un nuevo control de seguridad donde no es necesario sacar dispositivos ni líquidos del equipaje de mano. El sistema definitivo contará con 22 arcos y 44 líneas de inspección. Además, en el Módulo A se ha reubicado el control de pasaportes, se han instalado paneles de vidrio y se han añadido más fingers en la zona oeste.
Por otro lado, el acceso al Módulo D se ha mejorado con tres fingers nuevos y una pasarela ampliada para agilizar los flujos de pasajeros. La séptima planta del aparcamiento, abierta hace meses, suma 750 plazas y está preparada para futuras instalaciones fotovoltaicas. En total, AENA ha invertido más de 600 millones de euros desde 2022 en la transformación del aeropuerto de Palma.
