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Pedro Castillo fué elegido en el 2021 aprovechando una ola de frustración con la política convencional.
El ex presidente de Perú, Pedro Castillo, es uno de los dos ex mandatarios de esta nación sudamericana en recibir una condena a prisión en apenas dos días.
El jueves, el líder izquierdista recibió una sentencia de 11 años de cárcel por intentar disolver el Congreso de Perú y gobernar por decreto en el 2022. Su apuesta falló, y fue destituido y arrestado.
La Corte Suprema lo declaró culpable de “conspiración para cometer rebelión” e impuso la sentencia al mismo tiempo que lo condenaba.
La condena de Castillo llega solo un día después de que otro expresidente peruano, Martín Vizcarra, recibiera 14 años de prisión por aceptar sobornos cuando era gobernador regional.
Este político centrista, que había promovido la lucha contra la corrupción durante su mandato, fue hallado culpable de aceptar coimas mientras era gobernador de la región de Moquegua entre 2011 y 2014.
Los fiscales dijeron que recibió sobornos valorados en más de 600,000 dólares de empresas constructoras que buscaban contratos de obras públicas. Vizcarra siempre ha mantenido su inocencia.
Mientras tanto, la Corte Suprema absolvió a Castillo de otros dos cargos.
Conocido como el primer presidente pobre de Perú, Castillo, un ex sindicalista y maestro rural, alcanzó el poder en 2021 con una ola de frustración hacia la política tradicional.
Su arresto y destitución desataron protestas masivas y mortales en 2022 entre su base rural de clase trabajadora. Las protestas fueron reprimidas brutalmente por las fuerzas de seguridad, dejando al menos 50 muertos.
Según AFP, el jueves, decenas de seguidores de Castillo se reunieron afuera de la prisión donde está detenido para esperar el veredicto.
Una simpatizante, Julia Buendía, le dijo a la agencia de noticias que ella todavía cree que Castillo es inocente.
Reuters
Martín Vizcarra fue declarado culpable de aceptar sobornos de empresas constructoras
Vizcarra y Castillo son los últimos de una serie de expresidentes peruanos en ser encarcelados por mal comportamiento.
Ollanta Humala, quien fue presidente del país entre 2011 y 2016, fue declarado culpable de lavado de dinero y condenado a 15 años de prisión a principios de este año.
Mientras tanto, Alejandro Toledo, que gobernó desde 2001 hasta 2006, fue sentenciado el año pasado a más de 20 años de cárcel por aceptar 35 millones de dólares en sobornos de una empresa constructora.
Perú ha estado plagado de crisis políticas en los últimos años.
En octubre, los enfrentamientos entre manifestantes antigubernamentales y la policía antidisturbios en la capital peruana, Lima, dejaron un muerto y más de 100 heridos.
Las protestas surgieron después de que el actual presidente, José Jerí, jurara al cargo de manera interina tras la destitución de su predecesora, Dina Boluarte.
Boluarte fue destituida por los legisladores bajo el cargo de “incapacidad moral permanente” en medio del aumento de los índices delictivos en Perú.
Su presidencia estuvo marcada por varias investigaciones, incluyendo una indagación por corrupción apodada “Rolexgate”, sobre las acusaciones de que aceptó relojes Rolex como sobornos.
