Bring Her Back, dirigida por Danny y Michael Philippou, es una secuela oscura de su impactante debut, Talk to Me, que está entre mis películas de terror favoritas por su intensidad cruda y realismo. Con esta cinta, los hermanos Philippou exploran el duelo de forma aún más perturbadora, combinando devastación emocional con terror visceral.
La historia sigue a Andy (Billy Barratt) y Piper (Sora Wong), hermanastros que, tras la muerte traumática de su padre, quedan al cuidado de Laura (Sally Hawkins), una mujer que pierde a su hija ciega, Cathy. Aunque al principio parece cálida, su dolor la lleva a actos siniestros. Ollie (Jonah Wren Phillips), un niño mudo con comportamientos inquietantes, añade capas de miedo. El realismo que destacó en Talk to Me vuelve aquí, con una representación cruda del trauma y la lucha por adaptarse a un entorno hostil.
Sally Hawkins brilla como Laura, alternando entre ternura y locura de forma hipnótica. Barratt y Wong también sobresalen, mientras que Phillips asusta con su actuación casi sin palabras. La cinematografía de Aaron McLisky y la edición de Geoff Lamb intensifican la atmósfera opresiva, usando grabaciones VHS de rituales ocultos para sugerir el lado oscuro de Laura.
El filme explora el duelo como fuerza destructora, usando el terror para mostrar cómo el amor puede deformarse. Aunque algunos giros, como el papel de Ollie y los VHS, quedan confusos, el núcleo emocional es poderoso. La relación de Andy y Piper mantiene la historia conectada a lo humano, incluso cuando el horror arrecia.
Con un 91% en Rotten Tomatoes, Bring Her Back confirma a los Philippou como maestros del terror. No iguala la precisión de Hereditary o The Witch, pero su intensidad emocional es igual de fuerte.
Estreno en cines Luna Palace: 29 de mayo de 2025.
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