Los Copletes a la Verge dels Dolors se cantaban tradicionalmente por los lugareños para dar las gracias por la cosecha estival. Crédito: Alfaz del Pi
El domingo siete de septiembre, Alfaz del Pi celebró una de las festividades más antiguas de la región: Los Copletes a la Verge dels Dolors.
La celebración dio comienzo con la concentración de los participantes en la Plaza Mayor, previa al desfile multicolor encabezado por los festeros, la reina y sus damas de honor, acompañados por la Colla de Xirimiters de la Marina. Ya en la plaza, se entonaron las plegarias cantadas tradicionales a la Virgen, rescatando así una de las costumbres locales más longevas. La concejala de Fiestas y Tradiciones, Sandra Gómez, recalcó que este patrimonio inmaterial se ha conservado para que las nuevas generaciones puedan comprender mejor sus raíces e historia.
Los Copletes a la Verge dels Dolors eran entonados tradicionalmente por los vecinos para agradecer la cosecha veraniega. La costumbre, que desapareció durante la posguerra, fué recuperada en 1987 gracias a la iniciativa de los festeros del año anterior. Las melodías se rescataron mediante la memoria de los ancianos del pueblo, mientras que la letra –compuesta por un romance y varias estrofas– se había preservado por escrito de forma manuscrita.
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Música y danza tradicional
Este año, Kiko Brell y Ximo Ródenas se encargaron de recitar el romance introductorio. Las coplas fueron interpretadas por Marisa Cortés, Juan Antonio Pérez, Kiko Brell, Ximo Ródenas, Carles Martí, Cristina Pérez, Albert Ródenas y Maite Pérez, acompañados por Paco ‘Bessó’ a la xirimita y Manuel Pérez Pizarro al tabalet.
En la tarde, los festejos comenzaron con un animado desfile por la localidad, en el que participaron todos los cantantes, reinas de las fiestas, festeros y autoridades locales. A continuación, en la Plaza Mayor, tuvo lugar la interpretación del romance y de las 49 estrofas, cada una de las cuales relata uno de los siete dolores de la Virgen. La fiesta concluyó con los bailes tradicionales, abiertos a la participación de todos los residentes y visitantes.