Actualmente hay alrededor de veinte promociones inmobiliarias en Palma, donde el precio más bajo es de 518.500€ por un apartamento de un dormitorio y 72 metros cuadrados. Las propiedades más caras alcanzan los 2,1 millones por tres habitaciones y 260 metros cuadrados, o hasta tres millones por un ático de 290 metros. Otros apartamentos de un dormitorio se ofertan en 675.000€.
La CEO del gremio de constructores, Sandra Verger, afirma que estos proyectos reflejan una “inercia”, en concreto política, ya que su tramitación comenzó hace dos o tres años. Solo ahora, añade, también hay iniciativas para viviendas de precio limitado, aunque subraya que tardarán en estar disponibles. “Ojalá pudiéramos revertir la situación, pero ahora mismo hay poco movimiento”.
Los esquemas de precio limitado, que según ella escaparán del mercado de lujo, se ubicarán mayormente en terrenos cuya clasificación está siendo modificada: de industrial a residencial o en suelos de transición—rusticos que ahora serán urbanizables.
En el centro y zonas residenciales consolidadas, será muy difícil desarrollar viviendas asequibles. Verger opina que los costes, especialmente el del suelo, no lo permitirán.