Eitan y Iair Horn fueron secuestrados de Nir Oz el 7 de octubre de 2023 y permanesieron juntos en Gaza hasta que Iair fue liberado en febrero de 2025. Eitan fue liberado en octubre de 2025.
Dalia Cusnir, su cuñada, contó en una entrevista que los antiguos rehenes Eitan e Iair Horn estuvieron en un túnel lleno de explosivos.
“Hamás les advertía constantemente que si el ejército israelí se acercaba, todos morirían, los rehenes y los terroristas”, explicó.
“Vivieron cada segundo sabiendo que el túnel podía derrumbarse o explotar en cualquier momento.”
Durante el cautiverio, Eitan e Iair crearon lazos con otros rehenes, Nimrod Cohen y David Cunio, y el grupo hablaba a menudo de lo que harían cuando estuvieran libres.
“Entendieron que debían mantenerse fuertes y cuidarse el uno al otro”, dijo Cusnir. “Cuando uno caía, otro lo levantaba”.
Eitan e Iair estuvieron juntos en cautiverio hasta que Iair fue liberado junto con Sagui Dekel en febrero de 2025, cuando Hamás les hizo ‘elegir’ quién sería liberado.
“Eitan los vio marcharse y después vio las imágenes de su liberación. Ese tipo de tormento psicológico deja heridas profundas”, dijo Cusnir.
Eitan Horn en una manifestación por los rehenes con sus hermanos Amos e Iair Horn, 25 de octubre de 2025. (crédito: Paulina Patimer)
El camino hacia la recuperación
Ambos hermanos tienen un largo camino por delante para recuperarse física y psicológicamente después del abuso extremo que sufrieron.
“Ya están en casa y con vida, y eso es todo para nosotros. Pero el camino por delante es largo, emocionalmente, físicamente y, en el nivel más básico, en términos de seguridad… A Eitan, especialmente, le conmueve profundamente el amor y el apoyo que recibe del pueblo de Israel. Pero también está preocupado, porque mientras el círculo de nuestra familia se ha cerrado, otras familias todavía están esperando.”
Cusnir también habló sobre los efectos que el cautiverio tuvo en las familias de los rehenes, explicando que su esposo, Amos, debería haber estado en Nir Oz con sus hermanos el 7 de octubre.
“A veces aparece ese pensamiento, de que los tres hermanos podrían haber sido secuestrados”, dijo.
“Pero intento alejarlo. Amos ha cargado con mucha culpa, sintiendo que no estuvo allí para protegerlos, tomando su café de la mañana mientras ellos sufrían bajo tierra. Hay un largo camino por delante para todos nosotros.”