Davey arremete contra Reform UK y Nigel Farage al impulsar medidas de emergencia para eliminar la acumulación de casos de asilo

¿Logrará el mensaje de los Lib Dems sobre inmigración tener impacto?

Por Amanda Akass, Corresponsal política
@amandaakass

La entrada llena de espectáculo de Sir Ed Davey a la conferencia fue diseñada para promover dos mensajes.

El primero, y más obvio, era resaltar el ánimo optimista de su partido tras la elección récord de 72 diputados el año pasado y una serie de victorias en elecciones locales. Un gran contraste con las peleas internas cada vez más públicas entre conservadores y laboristas.

El segundo fue un intento de arrebatarle el concepto de patriotismo a lo que él describió como la política "divisiva" de Reform UK.

Las canciones eran alegres clásicos del pop y cayó confeti sobre los activistas reunidos, que ondeaban con alegría sus banderas del Reino Unido. Todo un contraste con el debate divisivo sobre el uso de banderas este verano.

Sir Ed es firme en que su partido no sigue el ritmo que marca Farage.

Pero ciertamente están dirigiendo sus ataques hacia Reform, repartiendo figuritas de Lego de Farage etiquetadas como "patriotas de plástico", completas con gorras de MAGA, entre los asistentes a la conferencia.

Aunque las políticas quizás no hayan cambiado tanto, los comentarios de Sir Ed sobre la importancia de deportar a migrantes ilegales de países seguros como Turquía y Brasil sí sonaron como una retórica más dura que la que habíamos escuchado antes.

A menos de una milla de distancia, había una marcha muy diferente. Manifestantes que blandían banderas mucho más grandes se dirigieron desde el muelle de Bournemouth a uno de los tres hoteles de asilo del pueblo, coreando consignas sobre detener los barcos, querer recuperar su país e, incluso, prohibir los burkas.

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Fueron recibidos por un grupo de contramanifestantes deseosos de dar la bienvenida a los refugiados (separados por varias filas de agentes de policía).

Ninguno de los dos bandos quedó especialmente impresionado por lo que los Lib Dems tenían que decir, aunque los contramanifestantes acogieron con agrado el compromiso del partido con las rutas seguras y legales, y sus peticiones para que se permita a los solicitantes de asilo trabajar y contribuir a la sociedad.

Los Lib Dems luego realizaron un mitin propio, pero el debate sobre el asilo y el patriotismo es fuerte. ¿Podrán hacerse oír por encima del ruido?