Para el período 2026-2029, el Ajuntament de Palma ha solicitado la autorización para el uso de 33.730 metros cuadrados de playa. Esta solicitud, dirigida al departamento de costas del govern balear, concierne a los servicios de playa: 5.000 hamacas junto a 2.500 sombrillas, 26 duchas, dos quioscos, módulos de alquiler de equipos náuticos y otros servicios. Dichas autorizaciones, que suelen concederse por cuadrienios, requieren de una renovación al término de los mismos.
Los ingresos estimados para estos servicios ascenderían a 6,3 millones de euros anuales. Esta previsión incluye las playas de Cala Major, Ciudad Jardín, Cala Estancia y Playa de Palma, mas no la de Can Pere Antoni, la cual ha sido excluida del informe económico que sustenta dicha estimación.
El mayor volumen de ingresos —superior a los cuatro millones de euros anuales— provendrá de las hamacas y sombrillas, que ocuparán la mayor parte del espacio (27.763 m²). Según el pliego de condiciones en elaboración, las hamacas deberán ser de color blanco o beige, quedando proscrito el tejido azul.
Las empresas licitadoras afrontarán un desembolso inicial para sufragar tanto los costes de adaptación a las nuevas especificaciones como las instalaciones no lucrativas, tales como pasarelas para personas con movilidad reducida y paneles informativos. La inversión estimada ronda los dos millones de euros, destinándose más de la mitad a servicios que sí generarán beneficio económico.
Está prevista la instalación de cuatro canchas de vóley playa, una de balonmano y otra de fútbol en la Playa de Palma. Asimismo, se eliminará un quiosco en Cala Major, pero se habilitará uno nuevo en Ciudad Jardín.
