Mientras el espíritu navideño comenzaba a apoderarse de la capital, pude aprovechar esa oportunidad con una cena en La Petite Maison (LPM) en Mayfair.
Al llegar al restaurante para una experiencia de alta cocina, salí de la lluvia –con un sonido casi cinematográfico para mi entrada– y pasé por la cortina que daba a un local lleno de comensales.
Me llevaron inmediatamente a mi mesa y a todos los invitados les dieron una revista de la casa para leer si lo deseaban.
Sentado en una extensión de la sala principal, este espacio también estaba lleno de personas disfrutando su velada.
En seguida me sirvieron agua (sin gas) y me tomé un tiempo para observar los alrededores, adaptándome a las conversaciones a mi al rededor –pueden ser un poco ruidosas, así que tenlo en cuenta– dejando que me envolvieran.
Luego llegaron, posiblemente, los dos miembros del personal más importantes: el sumiller y la persona que trae el pan.
El vino que ofrecen en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
Pedí una copa de Chateau Des Jacques Moulin-a-Vent Beaujolais 2022 y esa fue mi bebida para toda la noche – exquisita.
No soy un comensal habitual de restaurantes finos y, aunque intento siempre ‘fingir hasta que lo consigo’ en estas experiencias, no pude contener mi encanto con el amuse-bouche que tenia delante.
Pan, aceite de oliva y tomate de res de cortesía en La Petite Maison. (Imagen: Newsquest.)
La mesa viene con dos tomates de res y un limón para usar con el pan mientras consideras tu pedido, y servido con un toque de aceite de oliva y sal, es una forma maravillosa de comenzar.
Carpaccio de Boeuf en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
Pedí y, aunque los escargots –caracoles– estaban en el menú como un delicatessen francés, me contuve y opté por el maravilloso Carpaccio de Boeuf (£18) para empezar.
Llegó rápidamente, el solomillo curado y la vinagreta de pepinillos es un poco pequeño pero estaba lleno de sabor, especialmente por el pepinillo, y fue una excelente elección como entrante.
Sin embargo, hay una gran variedad de hors d’oeuvres para carnívoros y vegetarianos que se adaptarán a cualquier paladar.
Para mi plato principal, me tentó el Gnocchi a la Tomate Fraiche, mientras que las opciones de pescado incluían bacalao, lubina y dorada.
No obstante, me convencieron las Cotelettes D’Agneau Vivienne (£49) – chuletas de cordero marinadas con caviar de berenjena y piñones.
Cotelettes D’Agneau Vivienne en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
Cuando te enfrentas a tantas opciones, puedes desarrollar un arrepentimiento y envidia anticipados, pero con una guarnición de Ratatouille (verduras mediterráneas calientes con garbanzos a £22), creo que tomé la decisión correcta.
Ratatouille en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
También me trajeron una guarnición de Gratin Dauphinois (£11), ya que es la especialidad que acompaña al cordero, y agradezco la recomendación del personal.
El cordero, mezclado con el Gratin, el caviar y la ratatouille, fue una alegría inmensa, con mucha carne en los huesos, y sinceramente me entristeció que se acabara porque podría haberlo comido para siempre.
Gratin Dauphinois en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
No llores porque terminó, sonríe porque sucedió, me dije a mí mismo.
Ya estaba lleno y el postre no estaba en mis planes, pero llegó el menú y por una extraña coincidencia cinco minutos después, llegó un bol de tiramisú y helado de caramelo (£14).
Quienes me conocen saben que me encanta el tiramisú e incluso este verano probé uno de limón que era imbatible.
Pues bien, ahora lo es – el mejor tiramisú de mi vida. Enorme, perfectamente preparado con una mezcla de sabores ideal.
El mejor tiramisú de mi vida en La Petite Maison en Londres. (Imagen: Newsquest.)
LPM, con restaurantes en todo el mundo, no es barato pero tampoco lo intenta.
Lo que es, sin duda para mí, es una experiencia de alta cocina que puede ser un especial una sola vez para las personas que quieran viajar y experimentar Londres.
E igualmente puede ser el lugar al que la gente que puede permitírselo va con regularidad.
Sea cual sea tu grupo, LPM intentará brindarte una experiencia gastronómica memorable, con un personal que tanto escucha como te guía hacia lo que deseas y cuida de tus necesidades.
Lo recomiendo de todo corazón y no puedo esperar a volver algún día.
Para más información, visita https://lpmrestaurants.com/london/