El Ayuntamiento de Orihuela ha otorgado oficialmente el contrato de gestión del Centro de Protección Animal (CPA) del municipio a la organización sin ánimo de lucro Asoka. El contrato, valorado en €778,392.50, cubrirá un período de tres años con la posibilidad de extenderse hasta cinco años.
Este acuerdo incluye una amplia gama de responsabilidades: la recogida, cuidado y gestión de animales perdidos, abandonados o confiscados dentro de la jurisdicción de Orihuela. Además, Asoka supervisará la gestión de colonias de gatos callejeros, promoverá la tenencia responsable de mascotas y garantizará servicios de limpieza y mantenimiento en las instalaciones del CPA ubicadas en Lo Arques, San Bartolomé.
La Concejala de Salud, Irene Celdrán, enfatizó la importancia del contrato, declarando: “Este acuerdo garantiza un servicio de alta calidad que prioriza el bienestar animal, con especial atención a la protección y cuidado de animales vulnerables y abandonados en nuestro municipio.” Añadió que el centro está equipado para cuidar alrededor de 800 animales anualmente y cuenta con el personal y los recursos necesarios para operar según los estándares óptimos.
Según Celdrán, el contrato abarca todas las funciones vitales para el funcionamiento integral del centro, incluyendo atención veterinaria, socialización animal, adiestramiento de perros, procedimientos de adopción y estrictos protocolos sanitarios e higiénicos, todo coordinado bajo un programa de salud supervisado profesionalmente.
El CPA de Orihuela está oficialmente registrado como Centro Zoológico bajo el número A-0361 en el Registro de Centros Zoológicos de la Comunidad Valenciana. Está autorizado para albergar una variedad de especies, incluyendo perros, gatos, caballos, aves y pequeños rumiantes. La instalación tiene capacidad para 192 perros, 74 gatos y hasta 10 animales de granja grandes.
Características clave del centro incluyen recintos específicos por especie, áreas de cuarentena, una sala de partos, una unidad quirúrgica, almacenamiento en frío para animales fallecidos, almacenes, un silo de residuos sellado y un área de estacionamiento.
Celdrán también destacó la importancia de la gestión centralizada: “Coordinar todas las actividades dentro del centro es crucial para mantener el bienestar físico y emocional de los animales. Por eso es esencial contar con un único operador especializado que gestione todo el servicio.”
El nuevo contrato entrará en vigor tras la firma del acta de inicio en las instalaciones del CPA y se espera que refuerce el compromiso de Orihuela con políticas integrales de protección animal.
