El ex-presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, está a punto de ser condenado por un intento de golpe de estado.
Una transmisión en vivo de televisión el jueves mostró que tres de los cinco jueces del Supremo Tribunal Federal (STF) votaron a favor de condenarlo.
Sin embargo, los jueces aún pueden cambiar sus decisiones hasta que el veredicto se pronuncie el viernes.
En la cámara de cinco miembros, se necesitan tres votos de mayoría para la condena. Un juez ya votó por la absolución de Bolsonaro el miércoles.
Bolsonaro es acusado de conspirar con aliados para dar un golpe contra el gobierno de su sucesor de izquierda, Luiz Inácio Lula da Silva, tras su derrota electoral en 2022.
Según la fiscalía, él planeó imponer un estado de emergencia y convocar nuevas elecciones, pero no pudo ganar el apoyo del liderazgo militar.
El 8 de enero de 2023, seguidores del político de derecha asaltaron el Congreso, el Supremo Tribunal Federal y el palacio presidencial en Brasília.
También se dice que Bolsonaro sabía sobre planes para asesinar a Lula, al vicepresidente Geraldo Alckmin y al juez Alexandre de Moraes.
El hombre de 70 años enfrenta hasta 43 años de prisión, aunque la sentencia podría reducirse a arresto domiciliario debido a su edad.
Bolsonaro está bajo arresto domiciliario desde principios de agosto por violar condiciones y está siendo monitoreado por riesgo de fuga.
La defensa rechazó todas las acusaciones durante el juicio y argumentó que no hay pruebas sólidas de la participación de Bolsonaro en un plan golpista.
Sus abogados también hablaron de un “juicio político” en el que su cliente no tuvo una oportunidad justa.
Criticaron el papel de de Moraes como juez principal, ya que él jugó un papel central en las investigaciones y fue nombrado como un posible objetivo de los planes golpistas.
Para los seguidores de Bolsonaro, un “juicio previo” por parte del tribunal era por lo tanto inevitable.
Además de Bolsonaro, también serán sentenciados exmiembros del Gabinete y altos oficiales militares, incluyendo al exministro de Defensa Paulo Sérgio Nogueira, el exjefe de la marina Almir Garnier y el exasesor de seguridad de Bolsonaro Augusto Heleno.
Se les acusa de hasta cinco delitos, incluyendo intento de golpe de estado, participación en una organización criminal armada y daño a monumentos protegidos.